Tienen su sede en Valencia, han participado en la última edición de la feria Fruit Attraction (el certamen internacional más importante del sector frutícola y acaban de desarrollar una solución que permite reducir las pérdidas de piezas entre las frutas almacenadas y el volumen de residuos de plaguicidas que estas acumulan. Lo consiguen mediante tratamientos poscosecha consistentes en aplicar a la fruta agua electrolizada que se han probado en una cooperativa valenciana que maneja más de 8.000 toneladas de manzanas y peras cada año. Se llaman Aquactiva Solutions.
¿En qué consiste?
El objetivo del proyecto, desarrollado en colaboración con la Universidad de Cracovia, se ha centrado en probar la aplicación del agua electrolizada, basada en ácido hipocloroso producido in-situ, para reducir las pérdidas durante el almacenamiento y mejorar la vida útil y la calidad microbiológica durante el lavado de las frutas y verduras cosechadas, lo que permite reducir el residuo de pesticidas provenientes de la agricultura y convierte el producto final en un alimento mucho más beneficioso para la salud. La fruta se lavaba primero en tolva con el agua electrolizada y, después, se nebulizaba mientras se conserva en cámara.
Menos pérdidas
En el proceso, se han comparado datos de producción real de diferentes variedades: Lobo, Rubin y Champion. En el caso de la variedad Lobo de la temporada 2021/22 se han reducido un 56% las pérdidas en relación a la temporada anterior en la que no se trataron las manzanas con la tecnología Aquactiva. En las variedades Rubin y Champion, esta reducción de pérdidas ha sido respectivamente del 53% y 34%. Como parte del proyecto, la Universidad de Agricultura de Cracovia también ha realizado sus pruebas para comprobar la posibilidad de reducir los residuos de pesticidas de las superficies de la fruta y ha comprobado que, tras aplicar el tratamiento, la presencia de residuos de plaguicidas es un 25% menor.