Qué cuenta más a la hora de encontrar un empleo? ¿Saber hacer algo o disponer de una certificación que lo acredita? En informática, uno de los sectores más dinámicos en cuanto a generación de empleo, el paradigma está cambiando. Aunque las certificaciones importan y, sin ellas, todo se complica; las habilidades –aunque no estén certificadas- son decisivas. Hace falta, eso sí, que el potencial empleado sepa demostrarlas.
¿Por qué es así?
Según un reciente estudio elaborado por la empresa de invesigación Foote Partners,las primas de pago en efectivo por habilidades y certificaciones de TI en los últimos tres años han variado. Así, casi un tercio de las 682 competencias informáticas no certificadas y de las 614 certificaciones informáticas de las que hacen un seguimiento en Foote Partners cambiaron de valor. En el caso de las certificaciones, esos cambios, en la mayoría de los casos, fueron a la baja.
Nuevas tecnologías que irrumpen
La irrupción de nuevas tecnologías como la IA que, pese al interés que han generado, todavía no disponen de demasiadas certificaciones específicas que acrediten su conocimiento, tiene la culpa. Así, el valor de habilidades relacionadas con la IA es alto y, también el de las competencias en IA generativa. ¿Hay alguna certificación en este ámbito? IBM, hace dos años, creo una y el interés de las empresas por contratar empleados que dispongan de la misma ha crecido. De hecho, este año se paga un 10% más a quienes disponen de ella. Con todo, trimestre tras trimestre, es que las primas salariales por las certificaciones son inferiores a las que se asocian a las habilidades no certificadas, Mientras que el valor medio de las certificaciones de TI ha caído más de un 1% en los dos últimos años, el valor de las competencias no certificadas ha aumentado en una proporción similar. La prima salarial mediana para las competencias tecnológicas no certificadas analizadas por Foote Partners es ahora de algo más del 9,5% del salario base, mientras que la de las certificaciones de TI es del 6,5%.