Páginas que cargaban lentamente o sin imágenes, o servicios que directamente no funcionaban. Es lo que se encontraron ayer por la tarde los usuarios de servicios como Twitter, Netflix o Spotify, que se vieron afectados por el ciberataque más grave de la última década. El blanco del ataque, consistente en crear una demanda masiva hasta que el portal deja de funcionar, fue la empresa enDyn, que provee de direcciones DNS multitud de empresas.
Por ahora todavía no se saben todos los detalles del ataque, que todavía se está investigando, incluso con el FBI. Con todo, la empresa de seguridad Flashpoint asegura que los dispositivos que han perpetrado el ataque son un ejército de cámaras IP (cámaras de seguridad) y dispositivos grabadores infectados con un software malicioso que permite a los atacantes controlarlos remotamente y dirigir el tráfico sin descanso hacia un objetivo. En concreto, Flashpoint apunta al fabricante chino XiongMai Technology, que provee componentes para otros fabricantes. Por curioso que parezca, las cámaras de seguridad se han convertido en la herramienta ideal para perpetrar ataques como este porqué, al fin y al cabo, nadie apaga nunca una cámara de seguridad, y los fabricantes nunca se han fijado especialmente en su protección.
El ataque afectó a los servicios de estas webs en Estados Unidos por espacio de dos horas (entre las 13.30 h y las 15.30 h, hora catalana) y afectó en especial en la costa Este, pero también los servicios en Europa. En Twitter, por ejemplo, no se podían ver imágenes. Se calcula que más de mil millones de clientes por todo el mundo se vieron afectados por el ataque, en lo que es el tercer ciberataque masivo de estas características.