Lo tienen claro: a partir de 2025, los finlandeses no importarán ni un solo metro cúbico de gas natural licuado de origen ruso. Así lo ha indicado el Ministro de Clima y Medio Ambiente Kai Mykkänen. Desde 2022 no importan ya gas vía gasoducto.

 

Prohibición

Aunque no hay fecha concreta, el ejecutivo finés da por hecho que a principios de 2025 estarán “en condiciones” de activar una prohibición que pondrá punto y final a las importaciones que Gasum, empresa energética pública finalandesa, ha estado realizando a pesar, incluso de la Guerra de Ucrania. Dichas importaciones se realizan porque, según se establece en los contratos de larga duración que ligan a Gazprom y Gasum, los fineses tienen que realizar pagos mínimos independientemente del volumen de compra. Ahora, el gobierno del país escandinavo se ve en condiciones de poner fin a esos acuerdos.

Letonia y Lituania ya no importan gas ruso

Finlandia sigue así la senda abierta por Letonia y Lituania, otros dos países que, como Finlandia, perciben la deriva expansionista rusa como una amenaza y que prohibieron ya las importaciones de gas procedente de Rusia y Bielorrusia por “razones de seguridad”. Finlandia ha retrasado la medida al entender que debe esperar a que esta próxima primavera entre en vigor la reforma del mercado del gas que permite a los países de la UE adoptar estas decisiones. Los finlandeses, sin embargo, plantean la necesidad de que la UE tome una decisión conjunta. Desde 2022, Finlandia no recibe gas ruso mediante gasoductos y las importaciones de GNL han sido, explica el gobierno finés, menores.