Ming Chi Kuo, ese taiwanés que se entera de lo que se cuece en Apple antes que nadie, ya lo anda anunciando: la firma de Cupertino trabaja para lanzar el primer iPhone plegable antes de 2024 pero, por si no puedes esperar, ya existen alternativas. Son, por supuesto, un tanto singulares, pero ahí están: un grupo de usuarios, cómo no, orientales, se ha puesto manos a la obra y ha construido algo que, si no somos muy rigurosos, podría considerarse el primer iPhone (no oficial) plegable del que se tiene noticia
Más de un año de trabajo
Capacidad, lo han demostrado, tienen de sobras: durante más de un año y echando mano de un Galaxy Z Flip (primero) y de un Motorola RAZR (después) y con un iPhone X han trabajado como leones y lo han conseguido: primero extrajeron la pantalla (la primera capa del panel) y redujeron su firmeza para lograr que se pudiera flexionar y siguiese funcionando. Sólo en lograr eso tardaron cinco meses y, por supuesto, destrozaron un buen número de teléfonos: varios iPhone y el Galaxy Z Flip fallecieron en el intento, ya que el móvil coreano no se adaptaba al panel del iPhone. Por eso, finalmente, optaron por el Motorola RAZR. Después, les tocó reestructurar toda la plaza base. Para ello, emplearon una impresora 3D, cortaron en dos el teléfono para adaptarlo al chasis modificado del RAZR y hasta tuvieron que adaptar una bisagra.
¿Y el resultado?
El móvil que han acabado teniendo es completamente funcional, pero al plegarse queda algún que otro hueco. Sea como fuere, el móvil carga, hace fotos y permite llamar y navegar por la red, pero la batería tienen poca capacidad y si lo abres y cierras muchas veces acabas rompiendo la pantalla. ¿Un año entero de trabajo para esto? Seguro que, cuando se entere, Ming Chi Kuo se echa unas risas.