Alemania ha desconectado este mes de abril de la red todas sus nucleares, justo como pretende nuestro Gobierno hacer aquí en 2035, pero la población teutona no está de acuerdo con la decisión. Hasta un 59% considera que abandonar para siempre la energía nuclear con la desconexión de las tres instalaciones de este tipo que quedaban en el país centroeuropeo es un error.

Central nuclear Brokdorf en el estado aleman de Schleswig Holstein 1536x939
 

Encuesta

Los datos proceden del barómetro que Infratest dimap ha realizado entre la población alemana coincidiendo con los cierres y para la cadena pública de televisión ARD. Según la encuesta, un 34% de las personas consultadas considera adecuada la decisión de abandonar la energía del átomo. Otro dato relevante tiene que ver con la franja de edad que mayoritariamente está a favor de los cierres: es la que tiene entre 18 y 34 y, en ella, un 50% los apoya y un 39% está en contra. Un 11%, no opina. La población con entre 35 y 49 años está, por el contrario, mayoritariamente a favor de la continuidad de las nucleares, ya que un 67% rechaza los cierres y un 27% los apoya.

¿Y los mayores de 50?

Los mayores de 50 años, que vivieron en su juventud el máximo apogeo del movimiento antinuclear alemán –uno de los más potentes de su tipo en el mundo- están también mayoritariamente en contra del cierre de las nucleares: un 63% de los encuestados con entre 50 y 64 años no los ve bien y un 64% de las personas consultadas con más de 65 años tampoco está de acuerdo. Por afinidades políticas, sólo la mayoría de los votantes de Los Verdes (en un 82%) y el SPD (socialdemócratas, en un 56%) están a favor. Los votantes de la conservadora CDU están en contra de los cierres en un 83%. El 65% de los votantes del partido liberal FDP también rechazan el abandono de la energía nuclear. ¿Tiene sentido juzgar decisiones que afectan al futuro (y al bolsillo) de todos desde ópticas partidistas? En España, lamentablemente, parece que hacemos lo mismo y que nadie aborda la cuestión energética desde una perspectiva pragmática y no ideológica como, por ejemplo, hicieron hace bien poco Felipe González y José María Aznar. ¿Es el pragmatismo algo consustancial a la edad?