Hace nada, una alta directiva de Seat indicaba que el coche eléctrico generará como mínimo tanto empleo como el convencional, pero la realidad (que es tozuda) ha corregido ya sus declaraciones. En Ford-Almussafes, planta de fabricación de automóviles en la que la marca americana ha decidido fabricar dos coches eléctricos, 1.124 personas perderán su empleo.
Prejubilaciones
Ford plantea corregir el exceso de plantilla que se deriva de las nuevas necesidades productivas mediante prejubilaciones que se ofrecerán a los trabajadores nacidos en 1969 y 1970 con la esperanza de que las bajas sean voluntarias. Las condiciones no son malas, pero ahí está el hecho: Ford-Almussafes va a necesitar ahora casi un 20% menos de trabajadores.
¿Por qué hace falta menos plantilla?
Que Ford vaya a fabricar coches eléctricos es, a fecha de hoy, una garantía de que la planta valenciana no va a seguir el mismo camino que otras del grupo. La fábrica de Saarlouis, en Alemania, podría pasar en breve a manos del fabricante chino BYD y en 2021 la marca cerró sus tres fábricas de Brasil. Almussafes tendrá continuidad, pero Jim Farley, el director ejecutivo de Ford lleva meses siendo muy claro: fabricar coches eléctricos requiere un 40% menos de mano de obra que construir coches convencionales. El camino lo ha trazado Tesla, que lleva años demostrando que las cadenas de producción coches eléctricos se pueden robotizar al máximo.
Malas noticias
Para España, un país en el que la del automóvil es una de las principales industrias, son sin duda muy malas noticias porque lo que tenemos aquí son, principalmente, cadenas de montaje y no centros de investigación y desarrollo. Con el coche eléctrico, por tanto, harán falta plantillas menos nutridas porque su proceso de fabricación es más simple y sistematizable. En Seat, se habla ya de hasta 2.800 empleados menos cuando Martorell se electrifique y aunque sea cierto que el coche eléctrico creará empleo, nada nos garantiza que esos empleos vayan a estar en España