Si eres un conductor al día de las últimas tendencias, seguro que sabes que hay algo más eficaz que llevar siempre encima las útiles pero difíciles de colocar cadenas. Ese algo no es otra cosa que los neumáticos adaptados a las diferentes condiciones climáticas del año. Si te has decidido a usarlos, en pocas semanas ‘calzarás’ a tu coche con los de invierno pero, ahora bien, ¿cómo guardas el juego de neumáticos que no usas? Desde la OCU, nos dan consejos sobre cómo hacerlo.

 

Si no los conservas bien, perderán efectividad 

Una rueda en mal estado puede, indica la organización de consumidores, “incrementar la distancia de frenado hasta en un 20%” y eso equivale a mayor riesgo de accidente y, dependiendo del estado en el que el neumático se encuentre, la posibilidad cierta de una sanción. ¿Cómo guardar los neumáticos entonces? Lo correcto es almacenarlos en lugares “frescos, oscuros, secos y protegidos”, indican desde la OCU. Las variaciones de temperatura dañan el neumático, lo que hace que los trasteros y los sótanos sean especialmente adecuados para almacenar neumáticos.

 

Lejos de fuentes de calor

En el sótano o el trastero, tus neumáticos quedarán a salvo del Sol, pero si tienes allí la caldera de la calefacción puedes tener problemas, porque no es correcto almacenarlos cerca de fuentes de calor. Si tienes ocasión, almacénalos con las llantas, ya que evitarás deformaciones. Si lo haces así, lo mejor es colgarlos del techo o apilarlos habiéndolos inflado antes a una presión equivalente a 1 bar. En el caso de que no dispongas de dos juegos de llantas para almacenarlos montados en las mismas, una buena idea es limpiarlo. Este año, no te equivoques: haz todo lo que esté en tu mano para que, dentro de unos meses (cuando llegue el buen tiempo) tus neumáticos de verano estén en perfectas condiciones. La seguridad al conducir depende de ello.