Se llaman Campact, son alemanes y, como Change.org, recogen firmas para impulsar peticiones que se derivan a organismos, gobiernos o empresas. Igual que Change.org dan visibilidad a peticiones de todo tipo, pero una de las que mantiene ahora activas tiene como objetivo a la industria española de la fresa. Recogen firmas, en concreto, para que diferentes cadenas alemanas de supermercados dejen de vender fresas españolas. Cada año, la fresa genera entre 80.000 y 100.000 empleos en España y aporta un 8% del PIB de Andalucía, lo que equivale a más de 12.000 millones de euros.

 

140.000 firmas

De momento, se han sumado con su firma a la campaña unas 140.000 personas. Hay, incluso, un cebo: las fresas españolas, según explica Campact, “contribuyen a la desecación del Parque Nacional de Doñana”. Según ellos, “para cultivar fresas baratas para Alemania, España corre el riesgo de una catástrofe por sequía en uno de sus parques nacionales más importantes”. Con el objetivo de frenar esa supuesta catástrofe, Campact pide a cadenas como Edeka o Lidl que dejen de vender fresas españolas para, así, “presionar a la Junta de Andalucía” y dejar de “contribuir indirectamente a la desecación de Doñana”.

 

100.000 empleos

En Andalucía, que produce el 85% de las fresas españolas, se emplea a cada año en esta industria a entre 80.000 y 100.000 personas de enero a junio. El 52% son operarios españoles, el 20% procede de la UE y el 28% son trabajadores no comunitarios. Sólo en Huelva, operan 158 empresas dedicadas al sector. Los cultivos empezaron a mediados del siglo XX y la mayoría de las personas empleadas en el sector son mujeres. A Campact, parece, todo eso le da igual.