Aunque ya no se extrae carbón de allí, Puertollano será siempre junto a Langreo, Mieres y Peñarroya una de las cuatro capitales españolas de la minería del carbón. La última mina en cerrar, a cielo abierto, fue la Corta Emma que, ahora, seguirá produciendo energía, pero no gracias al lignito de sus terrenos, sino mediante placas solares distribuidas en tres parques solares que suman 188 MW de potencia. De la corta Emma, se sacaron entre 1976 y 2015 un total de 25 millones de toneladas de carbón.
Tres proyectos
Dos de los proyectos previstos en la antigua mina puertollanera los promueve Enel Green Power y se denominan Estrella Solar y Encina del Sol. Cada uno de ellos acumula 35,75 MW, juntos producirán 140,85 GWh y sumarán 128.000 paneles bifaciales que aprovechan hasta la energía del sol que se refleja en el suelo. Junto a estos dos proyectos, está previsto otro más denominado Rocinante que añadirá otros 117 MW y prevé cubrir hasta 5.000 hectáreas más de placas fotovoltaicas y está todavía en tramitación. Durante la etapa de montaje, los parques pueden ocupar hasta a 400 personas.
Olivares
La Corta Emma, la más importante de las minas a cielo abierto que operó Encasur, la empresa que tomó el relevo en Puertollano y Peñarroya a la histórica SMMP, ha sido rehabilitada íntegramente por Endesa, empresa de la que Encasur era filial, y acoge hoy, además de un lago, una plantación de 28.000 olivos que producen un excelente aceite de oliva virgen extra que se denomina, cómo no, Mina Emma.