La evolución tecnológica fascina a muchos por la innovación y la simplicidad que aporta a nuestra vida cotidiana, pero también inquieta a otros tantos por la posibilidad cierta de que muchos puestos de trabajo sean asumidos por dispositivos IA y, por supuesto, por la posibilidad de que, en algún momento de un futuro inconcreto, la IA se concrete en conciencias artificiales como Skynet o Hal 9000. ¿Puede conjurarse de algún modo este peligro cierto? Desde Visor.Ai, una startup que desarrolla soluciones de conversación inteligentes y que acaba de activar sus operaciones en España, creen que sí. Nos detallan un listado de condiciones que es imprescindible cumplir si queremos que las soluciones de IA que se desarrollen sean responsables. Y en este caso, las responsabilidad no es con el medio o el entorno: es con nosotros mismos.

 

Importancia de la intervención humana

Aunque parezca paradójico, es importante considerar las necesidades del usuario final que no busca una experiencia 100% automática y valora la interacción humana. En este sentido, el camino pasa por crear soluciones de IA que no busquen automatizar todas las interacciones, especialmente las más complejas que pueden requerir triaje e intervención humana.

Hacer comprensible la IA

En algún momento del proceso de desarrollo, será necesario explicar cómo funciona la solución a las distintas partes interesadas. Esta explicación debe estar pensada y diferenciada para cada uno de ellos. Por ejemplo, un inversor no tendrá el mismo nivel de conocimientos de programación que un desarrollador. Si queremos que los públicos confíen en las soluciones de IA, es imprescindible que todos entendamos cómo funcionan y para qué sirven.

Ciberseguridad

Explicar medidas de ciberseguridad que impidan la entrada de posibles hackers es fundamental. Basta con que, de manera maliciosa y sirviendo a quién sabe qué intereses, alguien cambie una respuesta predeterminada a una interacción para engañar al usuario final. Y eso debe impedirse.

Utilizar datos con responsabilidad

Para aumentar la precisión de los sistemas de IA se necesita una gran cantidad de datos. Dada la implantación de medidas como el RGPD -Reglamento General de Protección de Datos-, es crucial crear soluciones de IA basadas en datos recopilados de forma responsable y, por tanto, consensuada entre las partes que interactúan.

Fomentar la transparencia

Del mismo modo que debe tener en cuenta las aportaciones de todos los miembros de la empresa durante este proceso, también debe asegurarse durante el mismo de que todas las partes estén informadas sobre el impacto que la IA pueda llegar a tener en su lugar de trabajo.

¿Qué es Visor.ai?

Creada en 2016, Visor.ai es una empresa tecnológica, que desarrolla una plataforma de conversación inteligente para canales de Chat, Email y Voz para organizaciones que buscan evolucionar hacia la automatización del servicio de atención al cliente o la comunicación interna. La empresa cuenta con un equipo de más de 40 empleados que crece cada vez más rápido y ya ha creado servicios de comunicación inteligente para más de 50 clientes, concretamente en el sector de los seguros y la banca, entre los que se encuentran el Grupo Generali, Millennium BCP, BNP Paribas, Fidelidade y Zurich, presentando una tasa de resolución de problemas comunicacionales superior al 80%, sin intervención humana.