El veganismo, ya sea por convicción o moda, es una forma de vida que cada vez abrazan más personas y, en respuesta a esta tendencia, los expertos en tecnología de los alimentos desarrollan productos adaptados a las exigencias de estos nuevos públicos cada vez más numerosos. Uno de los últimos que se ha desarrollado es el queso vegano.
Desde Barcelona
Los responsables de este desarrollo son los promotores de la startup Väcka, que dispone en Barcelona de un laboratorio propio y de un restaurante en el que se pueden degustar estos, como poco, sorprendentes productos que se elaboran a partir de frutos secos, hongos y fermentos naturales. Detrás de Väcka está una pareja, formada por la argentina Ana Luz Sanz y el francés Maxime Boniface que, en 2012, decidieron dejar de consumir alimentos de origen animal y, al no encontrar alternativas al queso (uno de sus alimentos preferidos) decidieron desarrollar ellos mismos una alternativa vegana a este producto.
¿Cómo lo hacen?
Emplean leches de origen vegetal elaboradas con almendras, anacardos u otros frutos secos, fermentos naturales y hongos, aunque últimamente han desarrollado un nuevo producto, el Pumpkin Cheddar, que está hecho con un 60% de calabaza y puede untarse. A corto plazo, están incluso planteándose dejar de trabajar con frutos secos y utilizar otros productos, explican, que tengan menor impacto en el medio ambiente. Desde la web El Comidista, opinaban hace nada sobre sus productos y aseguraban que no tienen nada que ver con los ya tristemente clásicos “engrudos ultraprocesados que se venden en los supermercados con la etiqueta vegan” y afirmaban que, sin muchas dificultades, los productos de Väcka aguantarían el tipo en una tabla de quesos y hasta en una cata a ciegas. Los propios responsables de Väcka te lo explican en este vídeo. Todo es probarlo, claro.