¿Alguna vez te has preguntado por qué, por ejemplo, escogemos Google PlayStore en un móvil Samsung en lugar de Galaxy Store para descargarnos aplicaciones? ¿Has querido saber en ocasiones cómo puede ser que hasta en los móviles Appleel navegador de Google sea muchas veces la primera opción? La respuesta, lo adivinas, tiene que ver con el dinero. El juicio entre Epic –los creadores de Fortnite- y Google a propósito de las comisiones que los de Mountain View hacen pagar a Epic –y a cualquier otro desarrollador- por distribuir sus aplicaciones en la PlayStore lo ha demostrado. Desde 2019, Google ha pagado miles de millones para mantener su posición de dominio en el mercado.

 

8.000 millones pagados a Samsung

El acuerdo que permite que los sistemas de búsqueda, el asistente y la PlayStore sean servicios predeterminados en los móviles surcoreanos costó a los de Mountain View 8.000 millones de euros. Con Apple, también han firmado acuerdos similares, aunque la cuantía no se ha revelado en el juicio, pero equivale al 36% de los ingresos obtenidos por anuncios de búsqueda en Safari, el navegador de Apple. Todas las firmas implicadas, explican desde Bloomberg, están siendo investigadas por las autoridades antimonopolio estadounidenses.

¿Son legales los pagos?

Pues parece, al menos según Bloomberg, que en Estados Unidos no lo son. Mantener una posición dominante en un mercado –y eso intenta hacer con los pagos Google en el de los navegadores para web y móviles- mediante acuerdos que impliquen desembolsos sería una manera ilegal de alcanzar el liderazgo. El programa de pagos se llamaba Proyecto Banyan e incluía medidas tan pintorescas como, por ejemplo, ofrecer a Samsung distribuir Galaxy Store, la tienda de aplicaciones de esta última, dentro Play Store en vez de que estuviera preinstalada en los dispositivos fabricados por la empresa surcoreana. Además, se impedía que Galaxy Store ofreciera un sistema de pago propio.