Comprar una buena bicicleta se está poniendo cada vez más difícil, porque las innovaciones son continuas. Specialized, una de las marcas punteras del sector desde hace décadas, acaba de presentar una que va a revolucionar el mundo de la bici: el sistema STR o, si no te gustan las siglas, Suspend the Rider.

Avance lógico

En Specialized llevan años trabajando en la mejora de sus sistemas de suspensión y, gracias a ello, han logrado éxitos como el que supusieron las bicicletas Gravel, que aunque provienen del ciclocross, permiten rodar por asfalto, pistas de grava y pistas de tierra gracias a sus neumáticos más anchos. Se trata, sin embargo, de bicicletas que no podían incluir doble suspensión como las de las mejores bicicletas de montaña, ya que en las Gravel es muy importante aprovechar al máximo la energía que imprime el ciclista a la marcha. Ahora, con el sistema STR, lo han solucionado.

¿Cómo funciona?

En el sistema hay dos elementos clave: una extensión de la tija del sillín y un amortiguador hidráulico integrado en el tubo horizontal del cuadro. La tija incluye una extensión de fibra de carbono que se inserta en el tubo vertical, que crece. La extensión funciona como un muelle con 30 mm de recorrido y, gracias a él, la rueda se desplaza hacia arriba cuando se produce un impacto durante la marcha y el tubo vertical se desplaza hacia atrás. Con ello, el ciclista puede mantenerse en la misma posición sin que se comprometa la transferencia de energía que genera con cada pedalada. El nuevo sistema, además, es muy ligero y eleva el peso de la bicicleta sólo en 400 gramos.