La escasez de agua, según todo indica, ha llegado para quedarse y, por eso, toda iniciativa encaminada a optimizar las tecnologías de riego es bienvenida. Una de las últimas, creada desde la firma Agrodit, es responsabilidad de dos estudiantes de la Universitat Oberta de Catalunya.

 

¿Qué es?

Agrodit es una solución tecnológica que permite controlar cultivos y activar sistemas de riego hipereficientes para ahorrar costes y recursos. Sus responsables son María Fernández y Fernando Carrasco y ha sido testada ya en dos entornos reales: un campo abierto en el que se cultivan chirivías y un invernadero destinado a la producción de tomates cherry.

¿Cómo lo hacen?

El fundamento del sistema de Agrodit son una serie sensores de humedad y temperatura que se instalan en el cultivo y se conectan a una aplicación que combina los datos vadosados con las predicciones meteorológicas de la zona para, así, poder programar el riego en todo momento. Los sensores, por ejemplo, miden la humedad del suelo en tiempo real y evitan el riego excesivo. Al tiempo, ayudan a identificar necesidades concretas de agua para actuar de forma casi quirúrgica y no gastar más agua de la necesaria, lo que reduce también el desgaste del suelo. María y Francisco, aunque murcianos ambos, residen en Suecia y, desde allí han activado ya su empresa a través del programa de emprendimiento SpinUOC. Tienen ya quince clientes y entre ellos se cuentan los propietarios de las dos explotaciones (la de chirivía y la de tomates cherry) en las que desarrollaron sus primeros proyectos. Con su sistema, explican, se reduce en un 25% el número de horas de trabajo necesarias y, al menos en el caso de los tomates cherry, se llegó a obtener una calidad mayor que permitió vender la cosecha a precios un 20%  superiores.