El verano, del que quedan ya pocas semanas, es época de uso intensivo del móvil. Al pasar más tiempo fuera de casa y multiplicarse las actividades que se programan, el móvil se convierte en un compañero todavía más imprescindible y el consumo de batería crece. Si no dispones de un powerbank, quedarse sin batería es algo desgraciadamente frecuente. Conviene, por tanto, saber qué aplicaciones consumen más energía para administrarse adecuadamente.
Redes Sociales
Los sistemas de mensajería instanténa como Whatsapp o Telegram y, también, las redes sociales como Instagram o Facebook exigen conexión a Internet constante y desarrollan trabajo en segundo plano todo el tiempo. Todas estas tareas requieren de mucha energía.
Juegos, GPS y Plataformas
Otros ‘vampiros’ energéticos veraniegos con, por supuesto, el GPS, los vídeos y los juegos. Gmail, que se sincroniza cada pocos minutos, también contribuirá a dejar la batería del móvil en mínimos si no se tiene cuidado. Las aplicaciones de streaming, que han hecho realidad el sueño de llevar una televisión a cuestas que teníamos muchos de pequeños, también consumen lo suyo.
Soluciones
La solución a todo esto, por supuesto, es racionalizar el uso de las aplicaciones que más consumen. Desinstala las que menos uses o, si lo prefieres, inhabilítalas durante el tiempo que sepas que no vas a usarlas. Los sistemas de localización GPS, por ejemplo, no tienen por qué estar activados de manera constante. Si no quieres cargar con un powerbank y detestas quedarte sin batería, elimina o inhabilita todo lo que no sea imprescindible para el funcionamiento del sistema.