Seguro que más de una vez te habrás dado cuenta de que tu móvil se calienta demasiado, pero sabes por qué ocurre? De hecho, normalmente no solo se calienta, sino que a veces esto provoca que se vuelva más lento o que incluso se apague hasta que se enfríe. En todo caso, es algo malo y a lo que hay que intentar poner solución.
Por lo general, el excesivo calentamiento de un móvil sucede por una causa común. Bien por el uso excesivo del teléfono o porque se ha estado utilizando demasiado tiempo seguido funcionalidades como el Bluetooth, por ejemplo. También es posible que más de una vez hayas cerrado algunas apps o que hayas reiniciado el dispositivo en un intento de solucionar el problema sin demasiado éxito.
Muchas veces escuchamos o leemos que el sobrecalentamiento puede ocurrir por circunstancias como que el brillo de la pantalla es demasiado alto, que ha estado conectado durante demasiado tiempo a una red wifi o que se ha estado jugando durante horas con el móvil. Pero no debería sobrecalentarse por estas razones.
Mucho uso de la cámara
Aunque las opciones de conectividad, el alto brillo de la pantalla y los juegos pueden afectar la temperatura de un dispositivo, la configuración de la cámara también pueden influir. Un uso muy intensivo sacando fotos y, sobre todo, vídeos, puede provocar un sobre calentamiento. Sobre todo si la cámara está funcionando con la configuración de más alta calidad.
Por eso, si tienes que usar el teléfono para tomar fotos o vídeos y no es preciso que sea en la más alta calidad, ve a la configuración y elige un modo más sencillo.
La trampa de la funda
Si utilizas el móvil intensivamente en acciones exigentes, la carcasa o la funda puede impedir que el dispositivo se refrigere convenientemente al conservar el calor entre el accesorio y el dispositivo. Para evitarlo, quita el protector. Los móviles necesitan respirar cuando se les exige mucho o se calientan en exceso, dificultando que funcionen bien, pudiendo provocar, incluso, que sufran algún problema importante.
Si además funciona muy lento
Si te han infectado con algún tipo de malware o software malicioso, puede provocar un calor excesivo y volver más lento el dispositivo. Al fin y al cabo, cuando un móvil sufre un ataque de este tipo, hace que el teléfono realice muchas operaciones ocultas que acaban haciendo que suba su temperatura. Para saber si esta es la causa, lo mejor es descargarse una app de antivirus o de antimalware para realizar un análisis del dispositivo.
El cargador y la batería
Otro aspecto a considerar es el estado de la batería y el del cable del cargador. Si el móvil tiene ya unos años y se ha sobrecargado muchas veces, puede llegar a calentarse fácilmente. Los teléfonos no deben calentarse tanto como para causar problemas durante la carga. Si esto ocurre, la razón podría ser una batería dañada o que el cable del cargador sea de mala calidad.
Lo primero que hay que probar es si la situación mejora cambiando el cable del cargador. A veces, utilizar cargadores que no son el que viene en la caja, hace que surjan los problemas. Sobre todo si el cargador es de los más baratos que pueden comprarse en cualquier bazar.
Si no es un asunto que tenga que ver con el cargador, seguramente habrá que pensar en cambiar la batería del teléfono. Si esto no es posible, porque la batería no es extraíble, conviene consultar acerca de ello con la marca del teléfono y saber si el servicio técnico puede cambiarla. Por último, tendrás que valorar si te merece la pena pagar un cambio de batería o si ha llegado la hora de invertir en un dispositivo nuevo.