Una vulnerabilidad en la aplicación de mensajería WhatsApp ha permitido a los atacantes instalar en los dispositivos móviles de los usuarios un 'software' de vigilancia ('spyware') solamente con recibir una llamada de voz, y la compañía ha recomendado a los usuarios actualizar el 'software' tras difundirse un parche que soluciona el error.
El problema de seguridad de WhatsApp, descubierto en este mes de mayo y que ha estado activo durante semanas, se encuentra presente en la versión de WhatsApp tanto para Android como para iOS, según ha informado el diario Financial Times. El grupo israelí NSO Group, responsable del 'software' de espionaje Pegasus, es el autor del desarrollo del código malicioso de vigilancia, o 'spyware', que aprovecha una vulnerabilidad en la función de llamadas de voz de WhatsApp.
El 'malware' de NSO Group logra transmitirse al dispositivo de un usuario de WhatSApp cuando este recibe una llamada de voz por la aplicación, incluso en los casos en que el usuario no lo responde. Las llamadas maliciosas a menudo desaparecían del registro de llamadas. La vulnerabilidad de WhatsApp se ha descubierto este domingo cuando un abogado británico especializado en derechos humanos fue atacado a través de su teléfono utilizando la herramienta NSO Group.
Una vulnerabilidad de WhatsApp
El grupo de ciberseguridad de la Universidad de Toronto (Canadá), Citizen Lab, ha relacionado el ataque del pasado domingo con una vulnerabilidad para la que WhatsApp ha distribuido un parche de seguridad que lo soluciona, que llegó a los servidores el viernes y a los usuarios este lunes, como ha asegurado WhatsApp en un comunicado remitido a Europa Press.
"WhatsApp anima a los usuarios a actualizar a la última versión de la aplicación, así como a mantener el sistema operativo actualizado, para protegerse contra potenciales ataques dirigidos diseñados para comprometer la información almacenada en dispositivos móviles", asegura un portavoz de WhatsApp.
La compañía también ha informado a varias organizaciones de derechos humanos afectadas sobre la vulnerabilidad, para trabajar con ellas para notificar a la sociedad civil, y ha informado a las autoridades de Estados Unidos para iniciar una investigación.