Elon Musk calificó como "exitoso" el amerizaje del Starship tras su sexto vuelo de prueba, marcando un hito para SpaceX en su búsqueda de revolucionar los lanzamientos espaciales. Aunque la nave no completó todos los objetivos, el amerizaje controlado demuestra un avance técnico significativo hacia la reutilización total. Este lanzamiento incluyó mejoras respecto a intentos previos, como un control más preciso del descenso y el funcionamiento de los motores Raptor.
El propósito principal de estas pruebas es validar sistemas críticos que permitan que Starship sea completamente reutilizable, un cambio crucial para reducir los costos de exploración espacial. Sin embargo, los ingenieros aún enfrentan desafíos relacionados con la estabilidad en la reentrada atmosférica y la recuperación post-vuelo.
En camino hacia la reutilización total
La reutilización es el eje central de la filosofía de SpaceX. Para lograrlo, la empresa se enfrenta a un desafío inédito: atrapar el Starship utilizando "Mechazilla", una gigantesca torre de acero equipada con brazos robóticos. Musk ha confirmado que esta tecnología será probada próximamente, buscando eliminar la necesidad de aterrizajes convencionales.
El método actual, basado en amerizajes, si bien útil, requiere reparaciones extensas, incrementando los costos y tiempos de preparación. Mechazilla promete cambiar esto, permitiendo capturar la nave directamente en la plataforma de lanzamiento y devolviéndola rápidamente al servicio. Este enfoque podría revolucionar la forma en que las naves espaciales son reutilizadas, acercando la visión de vuelos espaciales tan frecuentes como los viajes aéreos.
¿Qué es Mechazilla?
Mechazilla es una torre de lanzamiento multifuncional diseñada para gestionar tanto el despegue como la recuperación de cohetes y naves. Con una altura de 143 metros, es uno de los sistemas más avanzados creados por SpaceX. Su principal característica son dos brazos móviles que funcionan como "palillos", capaces de moverse con precisión para capturar al Starship durante su descenso.
Esta estructura elimina la necesidad de plataformas de aterrizaje separadas y de maniobras complejas, lo que representa un avance sin precedentes en la tecnología de recuperación.
¿Cómo funciona Mechazilla?
Durante la reentrada, el Starship utiliza su sistema de propulsión para reducir la velocidad y estabilizarse. En lugar de aterrizar, la nave será guiada hacia la torre, donde los brazos robóticos de Mechazilla la capturarán en el aire. Una vez atrapada, la nave será posicionada directamente sobre la plataforma para su próxima misión.
Esta tecnología, aunque aún en desarrollo, podría reducir el tiempo entre lanzamientos a pocas semanas o incluso días. La implementación exitosa de Mechazilla consolidaría a SpaceX como líder absoluto en el camino hacia la sostenibilidad espacial.
Con cada prueba, SpaceX demuestra avances cruciales en el desarrollo de tecnologías reutilizables. Si Mechazilla logra cumplir con las expectativas, marcará un antes y un después en la exploración espacial, acercando el sueño de colonizar Marte.