El octavo lanzamiento del Starship estaba prevista para este 3 de marzo a las 00:30 hora peninsular española. Un ensayo es que crucial para la compañía de Elon Musk, especialmente después del incidente en la séptima prueba.
Lecciones del pasado: el fallo en la séptima prueba
El séptimo vuelo de prueba de Starship, realizado el 16 de enero de 2025, terminó en una explosión durante la fase de ascenso. Según SpaceX, una fuga de propulsor en la sección de popa provocó incendios sostenidos que llevaron al apagado controlado de todos los motores, excepto uno, resultando en la pérdida de comunicación y la activación del sistema de autodestrucción.
Este incidente subraya la complejidad y los riesgos inherentes en el desarrollo de vehículos espaciales avanzados. Cada prueba proporciona datos valiosos que informan mejoras y ajustes en el diseño y la operación del cohete.
Preparativos y mejoras para el octavo lanzamiento
Para esta octava prueba, SpaceX ha implementado varias mejoras en Starship:
-Actualización de los flaps delanteros: Se han rediseñado para reducir su exposición al calor durante la reentrada, mejorando la protección térmica del vehículo.
-Mejoras en el sistema de propulsión: Se ha incrementado el rendimiento del sistema de propulsión para optimizar el control y la eficiencia durante el vuelo.
-Rediseño de la aviónica: La electrónica de control ha sido completamente renovada para aumentar la fiabilidad y la capacidad de respuesta del cohete.
Además, se han instalado múltiples baldosas metálicas para probar materiales alternativos de protección térmica, y se han añadido versiones no estructurales de los accesorios de captura de Starship para evaluar su rendimiento en condiciones reales.
Objetivos de la octava prueba de vuelo
Los principales objetivos de esta prueba incluyen:
-Despliegue de simuladores Starlink: Por primera vez, Starship intentará desplegar cuatro simuladores de satélites Starlink, simulando una misión de despliegue de satélites.
-Reencendido del motor en el espacio: Se planea reencender uno de los motores Raptor mientras el cohete esté en el espacio, una maniobra crucial para futuras misiones de larga duración.
-Recuperación del propulsor Super Heavy: Se intentará capturar el propulsor utilizando los brazos mecánicos de la torre Mechazilla, un paso importante hacia la reutilización completa del sistema de lanzamiento.
Además, se probarán sensores de radar para mejorar la precisión en la captura del propulsor y se evaluará un nuevo ordenador de vuelo más potente junto con un sistema de distribución de energía y baterías inteligentes.
La naturaleza impredecible de las pruebas
SpaceX reconoce que "las pruebas de desarrollo son, por definición, impredecibles". Cada ensayo está diseñado para empujar los límites de la tecnología y descubrir posibles fallos antes de las misiones operativas. Esta filosofía permite a la empresa aprender y ejecutar rápidamente cambios de diseño, acelerando el camino hacia un Starship completamente reutilizable y de rápida recuperación.
En conclusión, la octava prueba de vuelo de Starship representa un paso significativo en el desarrollo de un sistema de lanzamiento revolucionario. Aunque las pruebas anteriores han tenido éxitos y contratiempos, cada una ha proporcionado lecciones valiosas que han informado las mejoras actuales. La comunidad aeroespacial observa con interés este lanzamiento, consciente de que cada prueba nos acerca más a una nueva era en la exploración espacial.