Se llama turbina oblonga, la ha desarrollado durante diez largos años el ingeniero aeronáutico cordobés enrolado en Airbus José Fernández Montes y acaba de ser distinguida como una de las diez patentes españolas más importantes de 2022 por el Club de Inventores de España, una asociación que, desde hace 40 años, se dedica a acompañar a inventores españoles en todos los procesos necesarios para que una idea capaz de resolver problemas cotidianos se convierta en un éxito. La turbina oblonga, consideran, podría revolucionar no sólo la aeronáutica sino, también, los sistemas de ventilación.

 

Pendiente de un estudio

Con todo, su responsable es cauteloso y recuerda que, de momento, su invento está pendiente de que se apruebe la solicitud de patente internacional, que permitiría proteger su idea en más de 150 países. Conviene, explica, que “más personas” desarrollen un estudio, porque el ingeniero ha desarrollado su idea “en solitario”. Es la manera, apunta, de que se puedan detectar posibles errores.

Supera las limitaciones de los motores actuales

Los motores actuales de los aviones funcionan gracias al movimiento circular de sus compresores y hélices, que rotan en torno a un centro de giro. Esta circunstancia los limita, ya que no es posible pasar en la punta de la pala de cierta velocidad determinada. En caso de hacerlo, el motor dejaría de funcionar. Con la idea de Fernández, que plantea un motor hueco por el centro con palas no unidas al eje, se puede, explica, “comprimir el aire de manera más eficiente” y ahorrar hasta un 10% de combustible. El recorrido que dibujan las palas de su turbina es oblongo y, de ahí, su nombre. Una vez comprobada la viabilidad de su idea, procedió a darle forma con una impresora 3D. Su creador considera que la turbina, además de para propulsar aviones o barcos de forma más eficiente, puede ventilar estancias y túneles con maquinarias más pequeñas, ya que el recorrido oblongo del aire permite comprimir éste utilizando un área menor.