¿Qué es lo primero que se te ocurre cuando; sea en tu casa, en la calle o en el trabajo; ves una cucaracha? Seguro que tu primer impulso es pisarla pero hacerlo no es buena idea. Así lo consideran, al menos, en la Organización Mundial de la Salud. Te explicamos por qué.

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Contienen bacterias

Las cucarachas, y en eso tienen razón las abuelas, pueden transmitir enfermedades y esa es una de las principales razones que no aconseja pisarlas. Cuando lo hacemos, las bacterias que estos insectos contienen pueden esparcirse en el ambiente y provocar problemas serios a personas inmunodeprimidas. De hecho, la lista de bacterias potencialmente peligrosas que las cucarachas ayudas a transmitir es muy larga y en ella caben la salmonella, los estafilococos que causan la diarrea, la bacteria Shigella que transmite la disentería o la Vibrio cholerae, que produce el cólera. Y nunca, bajo ningún concepto, pises una cucaracha cerca de alguien que sufra algún tipo de alergia o que padezca asma. De hecho, la OMS considera que su presencia no es adecuada para entornos urbanos y que se trata de un insecto que debe erradicarse de los asentamientos humanos por su condición de carroñero antihigiénico.

Cinco tipos principales en España

En España, existen 5 tipos de cucarachas: Blatella germanicaBlatta orientalis, Periplaneta americanaSupella longipalpa, Periplaneta australasiae. Todas ellas con especialmente resistentes y tienen una gran capacidad de supervivencia. Su exoesqueleto, que además es flexible, pueden soportar grandes fuerzas Por eso, un simple papirotazo no acaba con ellas. ¿Qué hacer entonces? Muy fácil: insecticida y el cadáver, a la basura.