Por lo visto, en 2030 no habrá smartphones. Eso dice, al menos Nishant Batra, director de estrategia y tecnología de una empresa que, en su día, lo fue todo si de móviles hablamos y hoy es un actor secundario del panorama. Además, Batra asegura que, cuando los móviles desaparezcan, será porque los superará el metaverso. La afirmación ha llenado noticiarios de medio mundo pero, quizá, no sea lo que parece.

 

Notoriedad

A Nokia, como a tantas empresas que fueron mucho y hoy son menos le hace falta notoriedad. Y la notoriedad se consigue, además de con realizaciones y desafíos superados, con afirmaciones pintorescas de esas que llaman la atención. La que nos ocupa, sin duda, es una de ellas, porque hablar de que algo fundamental en nuestra cotidianeidad puede desaparecer antes de diez años y que, encima, lo hará engullido por una tecnología, el metaverso, que defrauda a propios y extraños suena a eso que en Francia se llama boutade y aquí provocación. Y cuando llevas meses sin llenar titulares, el camino de la provocación es el más directo para conseguirlos.

¿De dónde saca Batra su idea?

Batra, parece, cree tener razonablemente bien atada su afirmación, pues considera que los dispositivos de realidad aumentada y realidad virtual imprescindibles para acceder al metaverso van a convertirse en herramientas ergonómicas y más baratas en breve porque, de lo contrario, todo el dinero que se ha invertido ya en el metaverso servirá de muy poco. Por de pronto, el escenario sin necesidad de móviles que sibuja está lejos, pero con dinero todo se puede. Ese dinero, lamentablemente, no lo tiene Nokia pero, cuando te descabalgan de los primeros puestos de cualquier ranking, cualquier cambio disruptivo se convierte en esperanza. Nokia (o Batra, tanto da) dice que los móviles desaparecerán porque espera que así sea, ya que considera que, en un contexto diferente, su empresa tendrá más posibilidades. De nuevo, es lo de siempre: cuando las circunstancias aprietan, se tiende a confundir deseos con realidades. Eso, y no otra cosa, es lo que se esconde tras lo que dice Nokia.