Hemos empezado el primer fin de semana de julio de una forma muy inestable y con un verano que parece no acabar de llegar. Esta madrugada del sábado han cruzado tormentas acompañadas de rayos y truenos que han dejado precipitaciones principalmente a zonas del Pirineo y Prepirineo. Durante la noche, esta línea de inestabilidad se ha ido desplazando y debilitando hasta llegar a la costa. La tarde del sábado ha estado protagonizada por las tormentas y granizadas que se han dado en el Pirineo, Prepirineo, también en las comarcas del sur de Lleida y al interior de las Tierras del Ebro, aparte de los chubascos en varios puntos del interior. Domingo día variable, pero sin lluvia generalizada. A partir de la próxima semana tiempo mucho más estable y soleado con temperaturas que irán subiendo a lo largo de la semana. En el siguiente vídeo os lo explicamos más detalladamente:

 

Tiempo variable con chaparrones en zonas de montaña

El domingo por la mañana empezará con un cielo bastante nublado en toda Catalunya que, a medida que avanzan las horas, se irá despejando, dejando por la tarde dejar un cielo soleado en buena parte del territorio. A mediodía, crecerán nubes convectivas en zonas de montaña que dejarán chubascos puntuales, algunos en forma de tormenta que afectarán especialmente el Ripollés y Pirineo.

Damos paso al verano

A lo largo de la próxima semana los termómetros irán subiendo hasta alcanzar su máximo el jueves, dejándonos así sensación de bochorno. Tiempo en general estable y soleado, salvo algún chaparrón en zonas de montaña debido a nubes de evolución que se pueden formar durante el día, por las altas temperaturas, especialmente lunes y miércoles.