No hay señales de una retirada del anticiclón ni de que afloje el calor, aunque ya hemos superado la canícula del verano, el periodo estadísticamente más cálido del año en Catalunya. La temperatura podría dispararse a finales de semana y se vislumbra lo que podría ser la primera ola de calor de 2023 en Catalunya. Mientras tanto, el jueves mejorará el tiempo, con más sol que nubes, no lloverá y el bochorno se hará insoportable en tramos de la costa. Ausencia de precipitaciones hasta finales de agosto, con el permiso de algunos truenos de tarde en el Pirineo occidental. En el siguiente vídeo repasamos los chubascos sorpresa del miércoles y os explicamos todo lo que necesitáis saber sobre la posible ola de calor:
Calma y monotonía tras las tormentas
El miércoles por la noche han llegado tormentas secas al oeste procedentes de Aragón, con mucho ruido y pocas nueces. El jueves pasaremos página y se espera una clara mejoría del tiempo, con dominio del sol y tan solo algunas telarañas de nubes altas, que se combinarán con algo de polvo sahariano en suspensión. Cielo enmarañado en conjunto y algunos bancos de nubes bajas matinales en el Empordà y en las Terres de l'Ebre. No lloverá en ningún sitio. El viento de levante tendrá mucho recorrido marítimo y dejará el mar un poco removido, ¡cuidado en las playas! La temperatura seguirá muy alta, como corresponde por las fechas, con valores de 30 °C a 35 ºC en general, menos en la costa, donde la marea hará bajar los termómetros, pero disparará el bochorno.
Ola de calor a la vista, las lluvias ni se las espera
Panorama meteorológico desolador a corto y medio plazo sin tormentas de verano a la vista, más allá de algunos truenos de tarde locales en el Pirineo occidental entre el lunes y martes. El sol será el único protagonista de la semana, salpicado por una temperatura que irá aumentando progresivamente con el paso de los días. Calor canicular hasta el sábado con noches de insomnio y bochorno intenso en la costa. El domingo podría empezar la ola de calor por un reforzamiento del anticiclón, que transportará masas de aire muy cálidas. Las temperaturas podrían superar los 40 °C durante tres días consecutivos en las comarcas de Lleida, el interior de Tarragona y la Catalunya Central, mientras que los 35 °C se podrían alcanzar con relativa facilidad en muchos pueblos y ciudades del prelitoral hacia el norte. Bochorno extremo en la costa con 28 °C a 32 °C combinados con humedades muy altas y noches tórridas en abundancia. Parece que lo peor del verano todavía estaría por llegar, lo iremos confirmando en los próximos días.