El mes de agosto arranca con perspectivas de cambios de tiempo muy importantes en Catalunya. Atención porque durante los próximos días viviremos situaciones muy distintas y extremas. Llega un calor asfixiante y, además, esperamos fuertes tormentas y granizadas que están a punto de visitar Catalunya. "Estos días está previsto que se superen los umbrales de intensidad, persistencia y extensión necesarios para poder catalogar este episodio de altas temperaturas de ola de calor. Sería la tercera de este verano", explica Rubén del Campo, portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET). Si queréis saber cuáles serán los peores días de esta tercera ola de calor y cuando llegarán las tormentas y las granizadas, no os perdáis este vídeo donde también veréis espectaculares imágenes de los diferentes fenómenos meteorológicos que ya son noticia en Catalunya:
Situaciones meteorológicas extremas en Catalunya
Independientemente de si este nuevo episodio de calor asfixiante se acabará declarando oficialmente como ola de calor lo que está claro es que durante los próximos días volveremos a sudar la gota gorda. Además, tenemos el mar más caliente que nunca con temperaturas de hasta 30ºC y eso convierte el Mediterráneo en una auténtica fábrica de vapor de agua que hará que este mes de agosto sea más cálido y bochornoso de lo habitual. Atención porque tendremos las peores noches tropicales. Y alerta porque que el mar esté tan caliente también provocará terribles gotas frías o DANAS a partir de mediados de agosto y sobre todo durante los meses de septiembre y octubre. Si tenemos bolsas de aire frío en altura y viento de levante en superficie, el tramo final del verano y la primera mitad del otoño nos traerá episodios de tormentas torrenciales, sobre todo en la costa y en el prelitoral.
La agricultura, peor que nunca
Catalunya sufre uno de los peores años agrícolas de la historia: heladas a principios de abril, olas de calor, sequía extrema y muy alarmante, granizadas... Todo eso complica y mucho la vida a los agricultores que, además, ven cómo las granizadas de estos días destrozan la poca fruta que les queda en los árboles y también algunos huertos. Las tormentas con granizo arrasan las plantas de calabacín, melones, sandías, tomateras... en muchos huertos de Catalunya. Así ha granizado, por ejemplo, en Viver de Segarra donde varios huertos han quedado triturados. Es solo un ejemplo de lo que pasa en varias zonas del país:
Granizada intensa la tarde del Domingo, siempre dicen que en la segarra no graniza, pero esta vez sí #324eltemps #ElTempsTV3 @alexmegapc @Vakapiupiu @meteocat pic.twitter.com/yd0S7gZJ4l
— David Garganté (@DavidGargante) July 31, 2022
Los agricultores de la Ribera d'Ebre afectados por las granizadas de los últimos meses se ven obligados a tirar la fruta al suelo porque no la pueden vender. "Se podría aprovechar para hacer zumo pero nos pagan una miseria y nos sale más a cuenta tirarla al suelo", explican algunos payeses del Ebro a ElNacional.cat. Así están algunos campos de nectarinas ahora mismo:
Temperaturas de bochorno de 40ºC en la costa
Este martes se presenta soleado y más cálido con máximas de 38ºC en el Pla de Lleida, en puntos de la Catalunya Central, de las Terres de l'Ebre y del prelitoral. En la costa, las máximas oscilarán entre los 31 y los 33ºC pero las temperaturas de bochorno alcanzarán los 40ºC por culpa de la humedad. Las noches serán cada vez más insoportables con mínimas que no bajarán de los 26ºC en la ciudad de Barcelona. Crecerán nubes en el Pirineo que, como mucho, dejarán alguna tormenta aislada. Los próximos miércoles, jueves y viernes también hará sol y mucho calor en todo Catalunya. Por las tardes, sin embargo, crecerán más nubarrones que dejarán tormentas en el Pirineo y en puntos de las comarcas de Ponent y de las Terres de l'Ebre. El próximo fin de semana, los días 6 y 7 de agosto, tendremos mañanas muy soleadas y cálidas pero más tormentas durante las tardes y las noches que podrían llegar a cualquier punto del país. Las temperaturas serán un poco más bajas especialmente durante los ratos que duren los chubascos.