A parte de las lluvias, septiembre ya nos ha dejado dos refrescadas poderosas. La primera fue los días 12 y 13 por una masa de aire frío de origen polar. La segunda es la que hemos tenido este fin de semana, también por una bocanada de aire frío procedente del norte. El domingo 29 de septiembre es el día de Sant Miquel, que los refranes populares y las medias climáticas lo relacionan con el veranillo de Sant Miquel. Este año hará fresco por Sant Miquel porque el veranillo se adelantó al jueves 26, tres días antes, a causa de los vientos de poniente recalentados que dejaron 30ºC en muchas comarcas. La refrescada del sábado de momento ya ha dejado -8ºC en la Pica d'Estats, el techo de Catalunya, o también 1ºC, en Puigcerdà, y 3ºC, en la Seu d'Urgell. La estocada final del verano ya está aquí.

 

Calma y fresco

La previsión del tiempo para el domingo anuncia una jornada muy tranquila con estabilidad absoluta. Cielo despejado y soleado todo el día con solo pinceladas de nubes altas. El viento aflojará en todas partes y girará del sur a suroeste con ráfagas moderadas al mediodía. La temperatura mínima bajará en el interior y los valles de los Pirineos a causa de la inversión térmica y la calma de vientos: posibles heladas locales y débiles en las zonas hundidas. Por el contrario, subirá en la costa y el prelitoral por la desaparición de la advección fresca. Ambiente de pleno otoño como si fuera principios de noviembre con noches frescas y mediodías agradables gracias al calorcito de la insolación.

Cambio de tiempo de segunda

El lunes volverá a ser una jornada muy plácida, parecida al domingo, con sol y nubes decorativas. El martes estaremos a las puertas de una pequeña inestabilización del tiempo y se notarán los primeros síntomas en forma de un aumento de las nubes y las primeras lluvias en la cara norte del Pirineo occidental. La temperatura subirá y se suavizará a causa de los vientos del suroeste prefrontales. El cambio de tiempo llegaría el miércoles con una borrasca poco activa y mal colocada en Catalunya que dejaría chaparrones con alguna tormenta entre las comarcas de Barcelona y Girona, y volverán a arreciar los vientos de mistral y tramontana a los dos extremos del territorio. La temperatura irá de bajada por la renovación de masas de aire y tendrá continuidad el jueves y el viernes con una nueva refrescada de otoño. Aunque lloverá en algunas comarcas, las precipitaciones serán mal repartidas y escasas, sin grandes llovidas.

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