El domingo ha sido un día con una bajada de las temperaturas, muy acusada en poniente con más de once grados de diferencia con respecto al sábado. El día ha tenido muchos ratos de nubes en todo el territorio y ha habido chaparrones dispersos y caóticos que han afectado a varios puntos de Catalunya. Las cantidades de precipitación acumuladas han sido modestas, las más elevadas han rozado los 10 litros de acumulado. Algunos chubascos han ido acompañados de tormenta pero sin granizadas. En el centro y sur peninsular las tormentas han sido mucho más intensas con piedras de gran tamaño.

Para la última semana de agosto nos espera calor y un cielo que no terminará de estar del todo despejado. No sufriremos ningún gran episodio de calor, pero todavía tendremos sensación de bochorno. También se desarrollarán tormentas de tarde que dejarán algún chaparrón y tormenta que no se espera que salga del Pirineo o Prepirineo. Te lo explicamos en el siguiente vídeo:

 


Sol, nubarrones y tormentas de tarde en el norte



Empezaremos la última semana de agosto con temperaturas normalizadas para la época del año en la que nos encontramos. Las temperaturas mínimas bajarán allí donde haya llovido el domingo y se notará esa bajada por la noche y primeras horas de la mañana. Las máximas en general se moverán entre los 29 y los 32 °C y un poco más frescas al norte. Por la mañana tendremos un cielo bastante soleado, pero con nubes bajas en el interior de las comarcas de Girona. Al mediodía se desarrollarán nubarrones en puntos de montaña que dejarán chaparrones y alguna tormenta en las comarcas del Ripollès, la Garrotxa y en el norte de Osona. El lunes será el último día de fuerte tramontana en la Costa Brava y todavía habrá olas que superan el metro de altura.