En muchos momentos de la conversación hablamos de las cosas que ha hecho desde que dejó la presidencia del Parlament. Se lo ve orgulloso de haber conseguido montar una empresa de encuestas, de las clases que está dando ahora en la Universitat de Lleida y, naturalmente, de la cafetería restaurante. Él y su mujer se han movido mucho observando, probando, tomando nota, escuchando. Y claro enseguida sale aquello de... Y, oye president, ¿la gente como reacciona cuando te ve implicado en un proyecto profesional y laboral? Quizás se piensa que lo haces porque te aburres, no porqué que sea la manera de ganarte la vida... Entonces él sonríe con cara de estar de vuelta de este tema. Sabe que está en el escaparate y no le importa reivindicar con orgullo su nueva vida.
- Ha corrido que el expresident del Parlament se ha jubilado y cobra una pasta gansa, pero no es verdad. Yo soy autónomo y tengo que ganarme la vida. He arrancado varios proyectos empresariales y me he especializado en la comunicación y en este ámbito hago desde consultoría a encuestas.
No le pregunto si ha contado las veces que le han soltado "pero oye, ¿tú por qué haces eso si cobras una pensión"?. Me temo, sin embargo, que han sido unas cuantas. Y que circule esta idea, lo inquieta. Mucho.
- Me molestan dos cosas, la hipocresía y la mentira. Y eso segundo me perjudica mucho. Yo estoy en el mercado. Si una empresa me quiere fichar, yo estoy disponible. Si la sensación es que estoy jubilado, no me vendrá a buscar a nadie.
Es la lucha entre la realidad y lo que mucha gente piensa que es la realidad. Un expresident del Parlament luchando para que la gente deje de creer que está todo el día sin dar un palo al agua cobrando un sueldo de por vida y que las empresas sepan que está disponible. La simplificación de la vida de los ex políticos...
- Cuánto sales de la política la gente te juzga de una manera injusta.
Y entonces le pregunto si es consciente de que mucha gente debe pensar que tiene la vida solucionada. Y hace cara de resignación. Y encoge los hombros como diciendo "qué le vamos a hacer". En todo caso, creo intuir que la suya es una reivindicación sobre todo profesional. Vaya, que le importa poco lo que piensen de él como persona. O en todo caso le importa más transmitir que no está jubilado como manera de abrirse puertas profesionales que no la necesidad de convencer a nadie de que sigue trabajando porque tiene que ganarse la vida.
Y entonces hablamos de la vida del político cuando se retira de la primera línea. Y pone un rictus serio. Y deja ir un discurso que se nota que tiene muy interiorizado...
- No puede ser que los políticos tengan determinadas prebendas, pero tampoco que dejes de ser alcalde o concejal y no tengas paro. Eso se tiene que resolver y se tiene que facilitar el retorno a la vida civil de la gente que se ha dedicado a la política.
Él y yo sabemos que ahora mismo eso es predicar en el desierto. Pero también sabemos que algún día se tendrá que resolver. Aunque sea para evitar a los políticos profesionales y para incentivar la entrada en política de gente "normal".