Lucía Martínez (Mieres, 1981) es dietista-nutricionista y graduada en Nutrición Humana y Dietética y tiene un máster en Nutrigenómica y Nutrición Personalizada. Entre muchas otras cosas, es autora el blog Dime qué comes, donde desmonta todos los mitos alimentarios. Antes de lanzarse al mundo de la nutrición ya trabajaba en la hostelería y lo hizo como cocinera y jefa de partida. Lucía se lamenta de que aún haya mucha gente que se decida a hacer dieta por motivos estéticos y no de salud y carga duro contra la industria publicitaria y las políticas en alimentación por presionar básicamente a las mujeres con los cánones de belleza que ellos mismos han establecido.
¿Cuánto aumenta la demanda de dietas en verano?
La típica operación bikini, que es como el día de la marmota, empieza normalmente cuando llega Semana Santa. Hay un repunte de preocupación tanto por parte de los consumidores por adelgazar siempre con una visión estética, no en salud, y siempre más en la población femenina.
¿Por qué casi siempre van dedicadas a las mujeres?
Porque es la que recibe la mayor presión a niveles de cánones de belleza y también es a la que están enfocados todo tipo de anuncios de este tipo, nunca los vemos enfocados a hombres.
Vemos hombres en anuncios de colesterol, que es salud, pero no en publicidad de productos para adelgazar.
Siempre se relaciona a los hombres con parámetros de salud y a las mujeres con estéticos.
A la industria, en general, la salud de las personas le suele preocupar poco
¿Por qué pasa esto?
A la industria, en general, la salud de las personas le suele preocupar poco, no suele estar en los primeros puestos de su lista. Lo que sí que está en ella es sacar rendimiento económico. Coca-Cola, por poner un ejemplo, te vende felicidad, amistad y buen rollo hasta el punto de que sus anuncios parece que no te vendan agua con azúcar. La felicidad es intangible. Lo mismo pasa socialmente.
¿Qué diferencia hay entre el trato de la industria hacia las mujeres y hacia los hombres?
La presión estética está sobre las mujeres y su realidad personal va ligada a su físico. Un hombre puede ser perfectamente apto como persona y trabajador con tripa, canas y calva; de hecho, suelen ocupar los puestos más importantes y las mujeres no. Cuando están en puestos importantes, se sigue juzgando la ropa que han llevado y el peinado.
La industria vende el producto que más necesitan por la presión que tienen con fines estéticos
¿Qué papel juega aquí la industria?
La industria simplemente les coge el guante y vende el producto que más necesitan por la presión que tienen con fines estéticos.
¿Son saludables los alimentos que promocionan?
Siempre son productos light cero o 'bajo en', pero ya de entrada no deberían formar parte de los alimentos saludables. Esto forma parte de toda la desinformación a nivel alimentario que tenemos hoy en día.
¿Estamos desinformados por una cuestión política o va más allá?
Es un problema transversal que afecta a cantidad de áreas. Este problema conjunto que tenemos con la alimentación y la comunicación de temas relacionados no se puede acatar desde un solo punto de vista.
En Catalunya han gravado las bebidas azucaradas con un impuesto.
Evidentemente hacen falta políticas que promocionen alimentos saludables. Ahora se están barajando políticas en las que se grava con impuestos algunos alimentos poco saludables como los refrescos también en otras comunidades.
¿Por qué no se hace una campaña gubernamental promocionando las endivias, el brócoli o las legumbres?
En la televisión, vemos muchos anuncios que promocionan marcas de leche.
Tenemos campañas de promoción de lácteos y de la carne de cerdo, que son productos que tienen un gran lobby detrás, pero aún se identifican como alimentos saludables. ¿Por qué no se hace una campaña gubernamental promocionando las endivias, el brócoli o las legumbres?
¿Cómo podemos estar mejor informados?
Hace falta acatar, desde el punto de vista de la educación, programas transversales en la educación obligatoria y otro tipo de actividades. Desde el punto de vista sanitario también habría que acatarlo porque los sanitarios están muy poco actualizados en este sentido. Habría que hacerlo en muchos frentes para conseguir resultados duraderos.
Soy yo la que me tengo que informar y pelear contra un sistema que cada día me intenta imponer yogures azucarados, cola-caos y galletas
¿En qué punto estamos?
El problema es que todo queda en manos individuales. Soy yo la que me tengo que informar y tengo que pelear contra un sistema que cada día me intenta imponer yogures azucarados, cola-caos y galletas en un sistema de salud que me da recomendaciones de los 80. Es mucho pedir al individuo que luche contra todos esos frentes, que se informe… Se necesita demasiada inversión de tiempo y no es realista.
¿Son sanos los alimentos procesados?
Los alimentos procesados son todos aquellos que han sufrido alguna transformación más allá de pieza y corte desde su estado original como materia prima en la naturaleza. Lo que tenemos que decidir es entre alimentos procesados y ultraprocesados.
Los alimentos ultraprocesados son los que sí o sí deberían estar todos fuera de una alimentación saludable
¿Cuál es la diferencia?
Los ultraprocesados son los que sí o sí deberían estar todos fuera de una alimentación saludable. En cambio, los procesados, tenemos muchos alimentos que pueden formar parte de una vida saludable como, por ejemplo, el aceite de oliva, que no te lo encuentras así en la naturaleza.
¿Cómo podemos distinguir un producto procesado saludable de uno que no lo es?
Normalmente, los alimentos procesados saludables tienen una lista corta de ingredientes de uno o dos y no llevan ingredientes añadidos, sobre todo azúcar, harinas refinadas y grasas saludables, que es la tríada que caracteriza a los alimentos ultraprocesados.
¿Los productos light suelen ser alimentos procesados o ultraprocesados?
Normalmente ultraprocesados, pero hay excepciones como la leche desnatada. Eso no quiere decir que sea recomendable. No todos los alimentos procesados son recomendables, pero algunos sí.
¿Cómo nos afecta el azúcar a nuestra salud?
Nos afecta el azúcar blanco, pero el moreno también. La diferencia que hay entre uno y otro es muy mínima.
Oler una naranja te da más vitaminas que una cucharada de azúcar de caña
¿El integral de caña también?
Sí, claro. Tiene un pequeño porcentaje de minerales y alguna vitamina que no tiene ninguna relevancia. Su efecto es exactamente el mismo que el azúcar más refinado. Oler una naranja te da más vitaminas que una cucharada de azúcar de caña. Eso también es un mito.
¿Qué pasa con todos los azúcares que vienen incluídos en los alimentos?
El azúcar añadido y el azúcar libre, que son los que habría que limitar, aportan a un alimento una cantidad desorbitada de azúcar. Además, viene en un formato que se absorbe muy rápido porque no viene acompañado de fibra o de la matriz adecuada, que impacta a nivel metabólico, a nivel hormonal, hepático, etcétera; y que fuerza un poco el metabolismo en ese sentido y hace que vengan todo este tipo de problemas como las diabetes u obesidades y muchas otras cosas.
El problema del azúcar es que lo tenemos a diario y varias veces, además
Mejor no consumirlo, pues.
Si esto lo haces al día, una vez al mes, no pasa nada. El problema es que lo tenemos a diario y varias veces, además. Si comes un precocinado, lleva mucho más azúcar; si luego te tomas un café, más; y luego meriendas un yogur azucarado. Es un impacto tras impacto continuo.
¿Qué nos puede ayudar?
El criterio a la hora de fiarse de la información. Hay que primar alimentos frescos: frutas, verduras, hortalizas, carne, pescado fresco, huevos, lácteos enteros sin azucarar, legumbres, frutos secos y aceite de oliva.
A veces, nos encontramos todos estos productos, pero vienen de la otra punta del mundo.
Debemos consumir productos de proximidad. Ese sería el mensaje político y económico. ¿Qué hacemos comprando kiwis de Nueva Zelanda? Con la cantidad de fruta que tenemos.