Esta semana Amnistía Internacional ha publicado el informe relativo a la investigación realizada desde el mes de mayo al de julio en Ucrania. Ha denunciado que las tropas ucranianas han incumplido las normas de derecho internacional en ámbito humanitario respecto a la población civil ucraniana. Ha denunciado que las tropas ucranianas se hayan asentado en edificios como hospitales, escuelas y en zonas residenciales, muy lejos de las líneas de fuego, sin haber evacuado a la población y poniéndola en peligro al tratarla como objetivos militares.
También hemos conocido las denuncias realizadas por el ministerio de Defensa de Rusia sobre los experimentos realizados por las empresas farmacéuticas norteamericanas y europeas en territorio ucraniano, utilizando para ello a militares, personas pobres y enfermos psiquiátricos. De la misma manera, el ministerio de Defensa ruso ha denunciado el hecho de que la Administración norteamericana pudiera estar implicada en la aparición del nuevo coronavirus, así como de la nueva pandemia de la viruela del mono.