La llegada de Trump al frente de la Casa Blanca está suponiendo un auténtico giro de la política a nivel global. Tal y como prometió durante su campaña, uno de sus primeros objetivos era poner fin al conflicto en Ucrania, y esta misma semana hemos visto cómo se han dado los primeros pasos para ello. Washington y Moscú se sientan a negociar y lo hacen sin Kiev ni Bruselas. Lo que deja claro el panorama actual: Europa no pinta nada, y es probable que tengamos que reconocer que tampoco ha pintado nada hasta ahora, salvo para tomar medidas contrarias a sus propios intereses.
Después de los primeros encuentros en Riad, desde EEUU y Rusia parecen coincidir en que Zelenski no puede permanecer más tiempo al frente de un país al que ha destrozado bajo su mandato. Acusaciones de corrupción, de falta de democracia y de no haber hecho nada para frenar el conflicto están ya sobre la mesa. ¿Se le ha terminado ya el tiempo a Zelenski?