TikTok es, posiblemente, la red social que más controversia, demandas y problemas arrastra tras de sí. Lo cierto es que esta red china se ha convertido en una de las más populares, especialmente entre las generaciones más jóvenes, y es un canal en el que mucha gente muestra una creatividad sin límites, se hace excelente divulgación, o se puede usar bien para informar, como estamos haciendo desde ElNacional.cat con nuestro 'Infotok':
📱 El Nacional crea 'Infotok', el primer informativo en catalán para TikTok e Instagram
Sin embargo, la normativa interna de TikTok, la naturaleza de muchos de sus contenidos, y el funcionamiento de la misma app, hacen que se levanten muchas dudas sobre lo adecuado de su uso, en especial por parte de menores de edad. Esto es lo que están descubriendo los expertos según van investigando.
TikTok es una devoradora de información personal
El pasado 20 de septiembre, el Director Global de SEO del marketplace Adevinta, Esteve Castells, explicaba cómo al enviar un video de TikTok a un amigo, falló el servicio de acortador de la URL, y se envió la URL completa, larguísima (con 21 parámetros). Castells, entonces, se puso a investigar:
La cantidad de datos obtenidos es ciertamente grande: fuente, sistema operativo, medio de compartición... y unos cuantos más poco claros (¿tipo de compartición social?) o directamente desconocidos. Esto no es raro, porque si algo permite el medio digital es la medición para optimizar el rendimiento, y eso es algo que hacen todas las empresas para mejorar. El mismo Castells explicaba que no pretende con esto caer en el alarmismo anti-TikTok, pero le sorprende la precisión milimétrica de la info obtenida.
Otros, en cambio, son algo más beligerantes con el funcionamiento de la plataforma.
TikTok envía datos de tu cámara incluso cuando no estás grabando
P. Duchement (@PDuchement) es ingeniero informático y perito judicial experto en delitos en redes sociales perpetrados por y contra menores, como el ciberacoso, el grooming o la sextorsión. Por su trabajo, conoce al dedillo las tripas de código de aplicaciones y redes sociales, ya que en ellas se encuentran las pruebas que le permiten detectar a un pedófilo, cazar a un familiar abusador, o al bully del instituto que envió a todos fotos de una compañera. Y no es precisamente un fan de TikTok, de hecho es el principal promotor del hashtag #TikTokNoEsParaNiños en X y otras redes, debido a sus riesgos potenciales.
Sin entrar en los casos que podemos encontrar en ese hashtag, hace un par de años P. Duchement descubrió algo inquietante: que la app de TikTok, si la cámara está activa, sigue enviando datos incluso cuando está parada o en pausa.
¿Qué implicaciones tiene esto? Pues bastante más siniestras que los 21 datos de la URL analizada por Esteve Castells, porque son datos directos de la cámara en un momento en que no esperamos estar enviando nada. Por ejemplo: si vamos a grabar uno de esos videos en los que das un salto y apareces con otra ropa encima, en el lapso entre que pausas el video, te cambias de ropa (quizá delante de la cámara) y vuelves a darle a grabar, se ha estado enviando información de tu cámara, quizá tus propias imágenes.
Se comprenden, pues, las reticencias que despierta esta app entre muchos gobiernos y autoridades. La cuestión de la privacidad ha abierto investigaciones aún en curso en Estados Unidos, en Holanda y otros países, y el Comité Europeo de Protección de Datos anunció en junio de 2020 la creación de un grupo de trabajo para investigar a fondo las entrañas de esta app.
Entretanto, si eres usuario de TikTok, disfruta del buen contenido (¡que hay mucho!)... ¡Pero ve con cuidado con lo que grabas y lo que compartes!