Una disputa entre vecinos por un árbol entre las dos casas se ha convertido en una "guerra" cuando uno de los propietarios cortó el árbol de hoja perenne por la mitad. Sin vacilar. Bharat Mistry, de 56 años, dijo que su vecino de al lado se había quejado de que las palomas anidadoras ensuciaban la entrada a su domicilio en Waterthorpe, Sheffield. Los dos intentaron llegar a una solución "amistosa" pero finalmente se ha impuesto el tratamiento de choque. Un cirujano de árboles se ha trasladado al lugar de los hechos para calibrar los daños.
Disputa viral en un vecindario
El vecino de Mistry, que no atendió a los medios locales desplazados, pidió que se quitara el árbol en marzo pasado, dijo Mistry. Esto llevó a "varias discusiones" sobre recortarlo o instalar redes para evitar que las aves anidaran y defecaran en las casas.
El Sr. Mistry hizo averiguaciones con los jardineros para resolver el problema, pero su vecino de 28 años se encargó de llamar a su propio arbolista: lo cortó por la mitad.
Desde entonces, el árbol se ha convertido en una atracción turística después de que se compartieran fotos del mismo en las redes sociales. La historia causó furor en Internet y hay gente que está viajando para ver la mitad árbol.
"Se ve horrible. Van a estar en la garganta del otro ahora, pero está hecho, no puedes deshacerlo. Tenemos una guerra a nuestra disposición con ellos dos", comentó un vecino del barrio.
Ann Wiles, quien también vive en la calle, dijo que los vecinos implicados habían organizado anteriormente fiestas infantiles juntos. "Hasta donde yo sé, se llevaban bien juntos", dijo. Se acabó lo bueno.
El perro que visita cada día la mina de carbón esperando a su dueño fallecido
Gonzalo Cruz fue uno de los siete trabajadores que murieron después de que una mina de carbón colapsara parcialmente en Coahuila, México, el 4 de junio. Cruz adoptó un perro, Cuchufleto, que lo acompañaba cada día hasta el trabajo. Desde el trágico suceso el perro sigue caminando hasta la mina en el municipio de Múzquiz casi todos los días -tres semanas después- y se le ha visto olfateando y rascando la superficie buscando a su amigo. Su historia ha conmocionado a los usuarios de las redes sociales.
Gonzalo Cruz, de 53 años, adoptó al perro Cuchufleto hace seis meses y todos los días desde que se unió a la familia el perro acompañaba a Cruz en la caminata matutina de media milla hacia la mina de carbón.