Jueves 21 de enero. El exdiputado de Unió Josep Sánchez-Llibre entra en la Audiencia Nacional para prestar declaración en el juicio contra los 15 ultras que durante la jornada del 2013 sembraron el pánico en el centro cultural Blanquerna de Madrid, sede de la Delegació de la Generalitat en la capital española. "Temí que aquello se convirtiera en una carnicería", declaraba a la salida ante la prensa.

En el exterior, 10 integrantes del Movimiento por España lo recibían con la pancarta "Separatas [independentistas] al banquillo". El movimiento, nacido de un grupo de Facebook con el nombre de "Franco y su Obra, la Verdad" y que asegura querer recuperar la España "que se ha destruido a conciencia desde hace 40 años", tacha al exdiputado de "sinvergüenza".

"Curiosamente la policía le hizo un trato de favor, dejándolo aparcar en la zona reservada para el personal de la Audiencia, mientras que a nosotros pretendían disolvernos con la excusa de que éramos más de 20", se queja la organización ultra. "¿Vosotros veis que seamos más de 20???", preguntan en un artículo en el blog con tres interrogantes insistentes.

Independentismo masónico

"El separatismo es masón, y eso lo explica todo", constatan citando al rabino Issac Wise y al antiguo primer ministro de Inglaterra Benjamin Disraeli, enfatizando, claro, que es judío. "Hay que volver el lunes", aseguran, en lo que será el cuarto día de juicio por estos hechos.

Pero la espera se les hace larga. "Ni que fuera Nüremberg", se lamentan, señalando que "está previsto que dure toda la semana". No quieren desfallecer y se emplazan a ir cada día "con tu bandera y tu pancarta".

La casta

Para Alianza Nacional, formación política que dice "no tener miramientos al declararse heredera de los fascismos europeos", fue una protesta de sentido común y pacífica. "Les enfadó escuchar a quince patriotas desenmascarando la mentira que sostuvo sus salarios durante los últimos cuarenta años", afirman. La organización, obviando las agresiones e intimidaciones sufridas por los asistentes al acto, dice que "les dolió a la casta político-burguesa catalana" que les dijeran que eran españoles.

La verdad "única, absoluta y eterna" es que "Cataluña es España". Quien lo niega, dicen, son traidores. Y "después de cuarenta años de cesiones, claudicaciones, burlas e insultos" la fuerza política fundada por el hijo del comandante del Ejército español asesinado por ETA, Ricardo Sáenz de Ynestrillas, afirma que "ya era hora de que alguien les plantara cara".

Oda a la nobleza

"Sois lo mejor de nosotros". Una semilla, una poesía. "Todos, incluso los que os critican, con una moral de pitiminí, una ética de salón y etiqueta manchada de sangre, envidiamos vuestra valentía", clama el militante de FE La Falange Mario Sánchez, partido que desde 2012 comparte paraguas, La España en Marcha, con compañeros de viaje como Alianza Nacional, Democracia Nacional o Nudo Patriota Español.

"Ustedes han levantado la bandera, la de nuestros padres y abuelos, para que ondee en el viento de nuestra mala conciencia", subraya. Y por ello, concluye que "es el pueblo que calla quien debería sentarse en el banquillo de los réprobos".