El café es una de las bebidas más populares y consumidas del mundo. Somos muchos los que no podemos imaginar una mañana sin una buena taza de café. Esta bebida, al igual que muchas otras, nos permite ser creativos y prepararla de muchas formas distintas y todas ellas buenísimas y muy fáciles: con leche, solo, cortado, amargo, espresso, capuchino, con mucho azúcar… Hay muchas formas de tomar café y no todas dependen solo de las preferencias personales, sino también del lugar del mundo donde nos encontremos. Por si no las conoces todas, te mostramos algunas de las maneras más populares de tomar café.
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Puede decirse que Italia es la cuna del café, tal como lo conocemos hoy en día. Otro lugar donde se precian de degustar café de calidad y bien preparado es en París. Y no olvidemos Viena, con esos románticos establecimientos donde tomar esta bebida es todo un arte gastronómico.
- Café espresso: creado en Italia, requiere una máquina especial que hasta ahora solo se podían permitir los bares. Se sirve en tazas pequeñas y se recomienda prepararlo con café 100% arábigo.
- Café americano: se hizo popular en Italia durante la Segunda Guerra Mundial, cuando se intentaba imitar el café de filtro al que estaban acostumbrados a tomar los soldados norteamericanos. Puedes prepararlo en una olla o en tu cafetera de toda la vida.
- Café cortado o con leche: la costumbre de añadir leche al café se popularizó en la segunda mitad del siglo XIX. El café con leche en italiano se llama caffè latte y en francés café au lait. Servido en tazas más pequeñas y con menos café, se trata de un café cortado, lo que en francés llaman café noisette.
- Café crème: realmente popular en Francia, parece un cortado, pero no lo es. En lugar de leche se echa crema de leche, lo que le da un sabor y una textura distinta al cortado habitual.
- Café macchiato: volviendo al juego que da la leche en el café, la palabra italiana macchiato significa «manchado». En realidad, se trata de leche espumada «manchada» con algo de café.
- Café Vienés: el café Vienés se popularizó en los locales de Viena, de ahí su nombre. Consiste en un espresso cubierto de nata montada, servido en una taza mediana. En España apenas se pide, pero es curioso sin lugar a dudas.
- Café bombón: ideal para los golosos. Se suele servir en taza o vaso de cristal transparente para apreciar la capa de leche condensada y el café. Esta combinación procede de Alicante. De ahí se extendió por toda España y, de hecho, al mundo entero.
- Capuchino: volvemos a Italia para conocer esta variedad de bebida cafetera conocida en todos los rincones del mundo. Lleva café espresso y leche espumosa, montada con vapor. Por encima se espolvorea canela en polvo o cacao.
- Café mocca: se prepara como un café con leche: con un tercio de café espresso y dos tercios de leche. La diferencia es que se cubre con una parte de chocolate, ya sea en polvo instantáneo o en jarabe, y se espolvorea con canela o cacao en polvo.
- Café Irlandés: este cóctel lleva un espresso doble con whisky irlandés, con una buena capa de nata montada encima. Se sirve en copas altas y vistosas.