Los quicos de bolsa son un clásico de los aperitivos, pero suelen estar llenos de aceites refinados, exceso de sal y aditivos que no benefician precisamente la salud. Por suerte, hacerlos en casa es mucho más fácil de lo que parece, y además es una alternativa más saludable y económica. No hace falta comprar maíz especial ni pasar horas en la cocina: con una simple lata de maíz puedes hacer unos quicos crujientes y llenos de sabor en pocos minutos. La creadora de contenido @crisysuairfryer ha popularizado esta receta en su cuenta de Instagram, demostrando que con ingredientes básicos y una freidora de aire se puede conseguir un resultado espectacular. Lo mejor de todo es que no requiere apenas preparación, por lo que en cuestión de minutos tendrás un snack listo sin complicaciones. Y si no tienes freidora de aire, también puedes hacerlos en el horno, aunque el tiempo de cocción será un poco mayor.

Cómo preparar quicos saludables en casa

El truco está en escurrir muy bien el maíz y secarlo con papel de cocina para que no quede humedad. Luego, se le añade una cucharadita de harina, que ayuda a dar ese toque crujiente, y especias al gusto: pimentón dulce, cúrcuma, sal y pimienta negra. Para potenciar el sabor, un chorrito de aceite y a la freidora de aire a 200 grados durante 15 o 20 minutos, removiendo de vez en cuando para que se doren de forma uniforme. El resultado es increíble: unos quicos dorados, crujientes y sabrosos, sin frituras innecesarias.

Hay tantas variedades como mezcla de especias / Foto: Unsplash

Esta versión casera no solo es más sana, sino que también permite jugar con los condimentos. Se pueden hacer con ajo en polvo, cebolla en polvo, chile para un toque picante o incluso con una mezcla de hierbas provenzales. Cada variación da un matiz diferente, permitiendo adaptar la receta a los gustos personales. Y lo mejor es que, al no llevar conservantes ni potenciadores de sabor, se pueden comer sin remordimientos. Incluso puedes hacer una versión dulce con canela y un toque de azúcar moreno para un snack diferente y sorprendente.


Además, son perfectos para tener siempre a mano como snack. Se pueden guardar en un frasco hermético y mantienen su textura crujiente durante varios días. Son ideales para picar entre horas, acompañar una cerveza o incluso para dar un toque crujiente a ensaladas y cremas. Olvídate de los quicos industriales y atrévete a probar esta versión casera: una receta fácil, rápida y deliciosa que hará que no vuelvas a mirar los de bolsa con los mismos ojos. Y lo mejor es que puedes hacerlos en menos de media hora con ingredientes que ya tienes en casa.