Si al hacer la compra buscamos carne picada en el supermercado, debemos prestar atención, ya que muchas de las bandejas que encontramos no son realmente carne picada, sino burger meat. Aunque visualmente puedan parecer lo mismo, existen diferencias importantes tanto en su composición como en su denominación legal.

Todo lo que lleva la burger meat

A diferencia de la carne picada, que solo puede contener carne y hasta un 1% de sal, la burger meat es un preparado que incorpora otros ingredientes, como cereales, vegetales, aditivos y conservantes. Según la normativa vigente, este producto debe llevar al menos un 4% de ingredientes vegetales cuando contiene sulfitos, un conservante común en este tipo de productos. En los supermercados, la mayoría de las bandejas que parecen carne picada son, en realidad, burger meat, con un porcentaje de carne que puede llegar hasta el 96%, pero en algunos casos apenas supera el 70%. Por eso, leer la etiqueta es clave para saber exactamente qué estamos comprando.

Carne picada / Foto: Unsplash

La legislación establece tres categorías principales de productos similares. La carne picada solo contiene carne y un pequeño porcentaje de sal. Su caducidad es corta y debe consumirse o congelarse en 24 horas. La burger meat contiene carne, ingredientes vegetales y aditivos como sulfitos, lo que permite que tenga una vida útil más larga. Por otro lado, las hamburguesas son preparaciones que pueden incluir condimentos y antioxidantes naturales, pero no conservantes ni aditivos, y su duración es intermedia, de unas 72 horas.

La carne picada solo contiene carne y un pequeño porcentaje de sal

Desde el punto de vista de la seguridad alimentaria, la presencia de aditivos y sulfitos en la burger meat no representa un riesgo directo para la salud. Sin embargo, un consumo excesivo de sulfitos podría ser problemático si se supera la dosis diaria recomendada, algo que podría afectar especialmente a adolescentes.

En el supermercado debemos leer bien lo que compramos / Foto: Unsplash

Si buscamos un producto de mayor calidad y sin añadidos, lo ideal es acudir a la carnicería y pedir que nos piquen la carne al momento. Así nos aseguramos de que no contiene ingredientes adicionales. En cambio, si preferimos un producto con mayor vida útil y listo para cocinar, la burger meat puede ser una opción, siempre que revisemos la etiqueta para conocer su composición. En definitiva, la diferencia entre carne picada y burger meat es importante, y conocer estos detalles nos ayudará a tomar una decisión informada al hacer la compra.