El chocolate es uno de los productos más apreciados en todo el mundo, pero no siempre lo que compramos bajo esa apariencia es realmente chocolate. El aumento del precio del cacao ha llevado a muchas empresas a reducir su cantidad en los productos y sustituirlo por ingredientes más baratos, como azúcares y grasas vegetales. Así lo ha explicado el nutricionista Luis Alberto Zamora en el programa de televisión Y ahora Sonsoles, donde reveló cómo el marketing de las empresas juega un papel clave para confundir al consumidor y hacerle creer que está comprando chocolate auténtico cuando en realidad no lo es.
Así nos cuelan falso chocolate en todos los supermercados
Según Zamora, para que un producto pueda llamarse "chocolate", debe contener al menos un 14% de cacao y un 18% de manteca de cacao. Sin embargo, muchas marcas han encontrado formas de bordear esta normativa utilizando términos más ambiguos en sus envases. Un ejemplo claro es el de algunos bricks de "a la taza", que en realidad contienen solo un 5% de cacao. La estrategia consiste en utilizar colores y diseños en el packaging que evocan al chocolate, pero sin llegar a llamarlo así en la etiqueta, evitando así regulaciones más estrictas.

Otro caso similar se da en la bollería industrial, donde la cobertura de "chocolate" en muchos productos no es tal. En vez de cacao y manteca de cacao, utilizan aceites vegetales y grandes cantidades de azúcar, lo que abarata el coste de producción y maximiza los beneficios de las empresas. El resultado es un producto con peor calidad nutricional, pero que sigue vendiéndose como si fuera chocolate real.
El problema no es solo económico, sino también de salud. Sustituir cacao por azúcar incrementa el consumo de hidratos de carbono simples, lo que puede favorecer problemas como la obesidad, la diabetes y otros trastornos metabólicos. Además, muchas de estas grasas vegetales añadidas son de baja calidad y pueden afectar negativamente al perfil lipídico de quienes las consumen de manera habitual.
Cuanto mayor sea la cantidad de cacao y manteca de cacao, más auténtico será el producto
Para evitar caer en estas trampas, Zamora recomienda a los consumidores leer siempre el etiquetado nutricional y fijarse en el porcentaje real de cacao. Cuanto mayor sea la cantidad de cacao y manteca de cacao, más auténtico será el producto. También aconseja optar por chocolates con alto contenido en cacao, preferiblemente por encima del 70%, y evitar aquellos que en los ingredientes incluyen aceites vegetales hidrogenados o azúcares en grandes cantidades.