Hace tiempo que el carpaccio llegó a las cartas de nuestros restaurantes y está claro que lo hizo para quedarse. Es uno de los principales habituales y un clásico a la hora de buscar raciones para compartir. Suele servirse con pan crujiente o tostadas finas, permitiendo una textura complementaria. También puede incluir brotes frescos, rúcula o una pizca de flor de sal para resaltar su sabor, así como parmesano, foie o una mezcla de especias. Eso sí, todos estos complementos solo están en la base, es decir, en las capas de arriba de plato. Por eso, en cuanto lo ponen en la mesa, todo el mundo se lanza a pillar el trozo de carne con más aderezo y más sabor.

El plato muy popular que comemos de forma errónea

Y esa lucha de tenedores ocurre sobre el plato porque nos lo comemos mal. Así de claro nos lo ha dejado el cocinero Ramon Tudela, quien lidera L'Arrosseria No Rules de Lleida. Aunque se trata de un restaurante cuya especialidad son los arroces, el joven chef no duda en compartir en sus redes sociales información tan importante como la que nos ayuda a saber comer un carpaccio de forma correcta.

Carpaccio plato / Foto: Freepik
Un plato de carpaccio / Foto: Freepik

Así, la próxima vez que pidas este plato ligero, pero con tanto sabor, antes de pinchar y dejar de pinchar a nadie, retira las tostadas del plato y comienza a ejercer presión en un lateral para comenzar a enrollar la carne sobre sí misma. Como si estuviésemos haciendo un rulo o un canelón. Poco a poco y seguro que, para asombro de muchos, toda la carne quedará enrollada y en el centro se concentrarán el aderezo y demás ingredientes del plato.

Una vez nos quede un rollo perfecto, toca cortarlo en trozos de bocado, empezando por una punta y hasta terminar el plato. ¿Qué conseguimos así? Que cada bocado contenga todos los ingredientes del plato y el sabor que el chef quería lograr cuando lo preparó. Así, no está el listo que se zampa de un bocado, el foie que estaba en el centro o todo el queso y a ti te queda el trozo del fondo, ese que no ha visto ni el aliño.

Carpaccio plato / Foto: Freepik
Cómo comer un carpaccio de forma correcta / Foto: Freepik

El carpaccio está de moda

Hoy, la moda del carpaccio va mucho más allá de la clásica ternera. Se ha convertido en una opción versátil que también incluye pescados como el salmón o el atún, mariscos e incluso opciones vegetales con remolacha o calabacín. La clave está en la calidad del producto: la frescura y el corte perfecto son esenciales para que cada bocado conserve su textura delicada y sabor puro. El aderezo, por su parte, debe ser sutil; un toque de aceite de oliva virgen extra, unas gotas de limón, alcaparras o un poco de parmesano rallado son suficientes para realzar sus sabores sin eclipsarlos. Eso sí, la forma de comerla es la misma y gracias a este joven cocinero ya la tenemos más que controlada.