La chef del Semproniana, Ada Parellada, se adentra en las casas de los foodies más intrépidos de Catalunya para resolver dudas semanales sobre los productos del día a día. Desde verduras y todo tipo de hortalizas y frutas, hasta cualquier tipo de dulce, pasando por la carne y el pescado. Maneras para aprovechar los alimentos en su esplendor, técnicas innovadoras y consejos que, en definitiva, nos harán disfrutar de una vida y un recetario más cómodo en los fogones de nuestra casa. El consejo revelador que esta semana nos expone la cocinera catalana es cómo aprovechar al máximo un queso que se ha secado en la nevera de la forma más sencilla.
Coge libreta y bolígrafo, y dale al play al vídeo para averiguar todos los consejos de Ada Parellada de esta semana
Cómo aprovechar el queso seco
A todos nos ha pasado que tenemos un queso en la nevera durante demasiados días y se nos acaba secando de más. Si se te seca un queso, no lo tires, aprovéchalo con estos trucos de cocina.
Para recuperar el queso, envuélvelo con papel húmedo y papel filme. Déjalo descansar un par de horas y ya lo habrás recuperado del todo. Verás cómo el queso vuelve a tener textura y se vuelve más tierno. Pero si el queso es muy, muy seco, y ves que no se ha recuperado del todo, hay alternativas para ponerle solución.
Haz conserva de queso en un tarro con aceite. Corta el queso a dados y ponlo en un tarro de cristal con una hoja de laurel, una bicho y tomillo. Llena el recipiente de aceite hasta arriba y déjalo confitar durante al menos una semana. Obtendrás un queso delicioso, pero también un aceite diferente con sabor a queso.
Para aprovechar un queso muy seco puedes rallarlo y utilizarlo como quieras: para gratinar, para añadir a la pasta...
Por último, si quieres hacer una receta más rápida, para aprovechar un queso muy seco puedes rallarlo y utilizarlo como quieras: para gratinar, para añadir a la pasta... Pero la receta más divertida es, sin duda, el crujiente de queso. Ralla el queso y ponlo en una bandeja de horno con un poco de orégano y pimentón. Ponlo al horno, sin aire, durante 15 minutos a 180 grados. ¡Cuando lo saques, en caliente, ponlo en un rodillo para que el crujiente coja una forma ondulada, y a disfrutar!
¿Te han parecido interesantes y útiles estos consejos? Prepárate para descubrir todo un mundo nuevo y profundo sobre decenas y decenas de productos y alimentos de todo tipo. En un futuro próximo pasarán por la revisión cuinófila y sabia de Ada consejos que no podemos revelar todavía. Mientras tanto, puedes aprovechar para recuperar el tip de la semana pasada, y descubrir cómo hacer una masa de pizza perfecta. ¡Hasta la próxima semana!