La chef del Semproniana, Ada Parellada, se adentra en las casas de los gastrónomos más intrépidos de Catalunya para resolver dudas semanales sobre los productos del día a día. Desde verduras y todo tipo de hortalizas y frutas, hasta cualquier tipo de dulce, pasando por la carne y el pescado. Maneras para aprovechar los alimentos en su esplendor, técnicas innovadoras y consejos que, en definitiva, nos harán disfrutar de una vida y un recetario más cómodo en los fogones de nuestra casa. El consejo revelador que esta semana nos expone la cocinera catalana es cómo hacer ñoquis de calabaza, un truco indispensable que no podrás dejar de utilizar.

Coge libreta y bolígrafo, y dale play al vídeo para averiguar todos los consejos de Ada Parellada de esta semana.

Cómo hacer ñoquis de calabaza

Los ñoquis son un tipo de comida que se suele hacer con patata. Ahora en otoño, sin embargo, los podemos hacer de calabaza, un producto de temporada con multitud de aplicaciones exquisitas. La gracia de los ñoquis es que los puedes hacer de diferentes maneras y se pueden acompañar con muchas salsas distintas. Esta versión de otoño es sencilla, sabrosa y muy original. Unos ñoquis con los cuales triunfarás y que después podrás replicar con los productos de temporada que más te gusten.

Ingredientes:

  • 400 g de puré de calabaza asada
  • 2 cucharaditas de sal
  • 800 g de harina
  • Una yema de huevo
  • Una cucharadita de ajo en polvo
  • Una cucharadita de nuez moscada
  • 200 ml de nata líquida
  • 50 g de camembert
  • 50 g de parmesano
  • 50 g de gorgonzola
  • 50 g de queso maó
  • Orégano

Esta versión de otoño es sencilla, sabrosa y muy original

Ñoquis de calabaza
Ñoquis de calabaza / Foto: Raquel Sánchez

Elaboración:

Para hacer la salsa, tenemos que poner la nata y los quesos en una cazuela. Fundimos  y reducimos ligeramente hasta que quede una salsa bien ligada, con la consistencia deseada. Si la queremos bien fina, trituramos. Asamos la calabaza al horno durante unos 40 minutos a 180 °C, con un chorro de aceite y sal. La rascamos y la chafamos hasta que quede bien pastosa. Lo aliñamos con el ajo en polvo, la sal y la nuez moscada. Añadimos la yema de huevo y lo mezclamos todo. Ponemos la harina y vamos amasando hasta conseguir una masa que se enganche, pero que se pueda trabajar. Una textura que nos permita hacer después la forma de los ñoquis, que no esté ni demasiado húmeda ni demasiado seca. Hacemos bolitas con la ayuda de más harina. Las hervimos en abundante agua y sal y cuando floten querrá decir que ya estarán en el punto de cocción ideal. Mezclamos los ñoquis con la salsa caliente y servimos con una pizca de orégano por encima.