La chef del Semproniana, Ada Parellada, se adentra en las casas de los gastrónomos más intrépidos de Catalunya para resolver dudas semanales sobre los productos del día a día. Desde verduras y todo tipo de hortalizas y frutas, hasta cualquier tipo de dulce, pasando por la carne y el pescado. Maneras para aprovechar los alimentos en su esplendor, técnicas innovadoras y consejos que, en definitiva, nos harán disfrutar de una vida y un recetario más cómodo en los fogones de nuestra casa. El consejo revelador que esta semana nos expone la cocinera catalana es cómo hacer la tarta de chocolate más deliciosa, un truco indispensable que no podrás dejar de utilizar
Coge libreta y bolígrafo, y dale play al vídeo para averiguar todos los consejos de Ada Parellada de esta semana.
Cómo hacer la mejor tarta de chocolate
La tarta de chocolate es uno de los postres más sibaritas de todos. Esponjoso, dulce y agradable, es un pecado que gusta a todo el mundo. El problema es que si no te lo acabas el mismo día se empieza a poner duro. Para solucionarlo, hoy te traemos una receta con la cual la tarta de chocolate te durará esponjosa hasta 4 días. Una manera ideal de preparar este postre sin que se eche a perder.
Ingredientes:
- 100 g de mantequilla pomada
- 175 g de azúcar moreno
- 2 huevos
- 70 g de chocolate
- 15 g de cacao en polvo
- 70 ml de nata líquida
- 70 ml de café líquido
- 140 g de harina
- 10 g de levadura química
- 5 g de bicarbonato
- Un pellizco de sal
Elaboración:
Lo primero que necesitarás es la mantequilla pomada. Bátela, añade el azúcar moreno, y sigue batiendo. Una vez mezclado, agrega los huevos, y sigue batiendo. Con esta receta, si no tienes una máquina, acabarás haciendo fuerza de brazo. Una vez hecha la mezcla, es la hora de ponerse con el chocolate. Utiliza un chocolate bueno y fúndelo al fuego. Para protegerlo y evitar que se queme, caliéntalo con un poco de nata y café. Una vez fundido, añade la mezcla a la mezcla de mantequilla. El último paso antes de poner la masa al horno son los ingredientes sólidos. En un bol, mezcla harina, cacao, bicarbonato, sal y levadura. Cuando lo tengas, pásalo por un tamiz e ponlo con la anterior mezcla. Es importante que lo vayas haciendo poco a poco para evitar que se creen grumos demasiado grandes. Cuando esté muy mezclado, asegúrate de integrarlo todo con una espátula y pásalo a un molde protegido con papel de horno. El papel evitará que la masa se enganche demasiado a las paredes y te facilitará la vida a la hora de retirarlo. Es momento de ponerlo al horno, durante 40 minutos a 170 grados. Una vez cocido, retíralo del horno y deja que se enfríe. Es importante ser paciente para que cuando lo desmoldes no se te hunda. ¡Buen provecho!