¿Sabías que estar bien hidratado es clave para sentirte bien y mantener la energía? Y es que no siempre se le da la importancia que merece debido a que no conocemos la gran repercusión que puede tener para nuestro organismo la falta de líquido. Además, es necesario aclarar que la deshidratación no solo ocurre cuando no bebemos suficiente agua, también cuando pierdes más líquidos de los que tomas, y puede tener efectos bastante molestos e incluso peligrosos para la salud de uno mismo. Desde mareos hasta problemas de piel, pasando por una falta de energía o dolor de cabeza. Los síntomas son variados y conviene conocerlos para poner remedio cuanto antes a lo que puede ser un gran problema.
Siete claves para saber si estás deshidratado
El nutricionista y experto en bienestar, Xavi Verdaguer, ha resumido en un post de sus redes sociales los siete síntomas claves que te pueden ayudar a detectar a tiempo una deshidratación.
Sensación de boca seca
Este es el síntoma más característico y también el más reconocible. Además, es el primero en aparecer.
Elasticidad de la piel
“Si tu piel pierde turgencia y tarda en volver a su posición inicial después de estirarla, es posible que estés deshidratado”. Y es que la crema que aplicamos después de la ducha no es la única fuente de hidratación que necesita nuestra piel. Beber suficiente agua también ayuda a lucir una piel suave, tersa y luminosa.
Orinar poco y orina de color oscuro
“La orina normal debe ser de color amarillo claro o transparente”, explica el experto. Si es más oscura puede ser un indicio de que hay demasiado sedimento debido al poco líquido que consumimos. Por lo general, una persona sana debe orinar unas 6 veces al día, siendo en 4 y 10 las ocasiones que se consideran normales.
Problemas de concentración y cambios de humor
Tan solo un 2% menos de la hidratación correcta ya puede impactar en la capacidad cognitiva de una persona. Sí, cuando se tiene mucha sed, cuesta más pensar y, por lo tanto, es más difícil tomar la decisión correcta, ser productivo o prestar atención a una conversación.
Visión borrosa y ojos secos
De la misma forma que afecta a la piel, la deshidratación también puede causar problemas visuales.
Mareos
Y es que llega un punto en el que no se es consciente de la necesidad de hidratación y el organismo se empieza a resentir. Esto es más habitual es los niños pequeños y las personas mayores. En estos casos de deshidratación severa, es habitual que la presión arterial descienda y que se puedan sufrir mareos, sobre todo al levantarse (afección denominada hipotensión ortostática).
Calambres musculares y dolores de cabeza
Esto ocurre tanto si no se ingieren suficientes líquidos como si se pierden por motivos como una simple resaca. La falta de líquido en el organismo es la culpable.
Pero, ¿cuánta agua hay que consumir para evitar estos problemas? El consejo de Xevi Verdaguer es “beber entre 1,5 y 2 litros de agua al día, aunque hay situaciones que requieren más atención porque causan mayores pérdidas de fluidos y precisan de más hidratación de lo habitual”. Como por ejemplo si hacemos deporte o si la temperatura es muy alta y se suda mucho. Por eso, en verano siempre debemos ir con una botella de agua bien pegada a nosotros y rellenarla varias veces al día.