La época de setas ya empezó hace semanas en nuestro país. A pesar de tratarse de una temporada irregular, según la zona de Catalunya, siempre hay cazadores de setas inexpertos que se adentran en los bosques sin tener muy claro unas diferencias primordiales a la hora de saber qué setas pueden recoger y cuáles no. Bien, recogerse, se pueden recoger todas; ahora bien, no todas las setas son comestibles. A continuación, repasamos los trucos imprescindibles para saber si una seta es comestible o venenosa.
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Cómo saber si una seta es comestible o venenosa
Hay setas que se parecen mucho entre ellas, y hay que tener siempre presente el consejo de no coger ninguna seta que no sepamos a ciencia cierta que es comestible. En todo caso, a la hora de escoger las setas podemos recurrir a guías, apps para el móvil y libros que nos ayudarán a distinguirlos. En todos los casos, nos tendremos que fijar en algunos elementos importantes.
El primer aspecto, y el más importante de todos, es si la seta es comestible. Hay especies de setas tóxicas que se pueden confundir muy fácilmente con otras de comestibles. Por eso, el primer paso es estar seguro de su identificación. A veces, las guías nos pueden dar información incompleta, o bien las podemos interpretar mal. No hay reglas generales para distinguir las setas tóxicas, y, en este sentido, las creencias populares son falsas.
- Aprende a identificarlos. Asegúrate de que conoces las setas comestibles y que no coges tóxicos. La formación en micología y la resolución de nuestras dudas haciendo consultas a las asociaciones micológicas son las opciones más seguras para saber identificarlos correctamente. Desde el formulario de consultas micológicas, puedes enviar imágenes de setas que quieras identificar a fin de que te demos una orientación sobre la especie consultada.
- Fórmate mejor. La Sociedad Catalana de Micología, aparte de atender cualquier petición de identificación de setas, organiza cursos de formación, así como salidas, exposiciones, etc. por todo el territorio.
- Recuerda: si no estás seguro de la comestibilidad de una seta, no te lo comas.
Los colores chillones son muy importantes. Ten precaución con colores chillones como el rojo, verdosos y anaranjados fuertes, ya que suelen ser indicativos de setas tóxicas. Aunque puedan resultar atractivas, es mejor abstenerse de recolectarlas. El otro elemento es el tallo. Observa el tallo al recoger o al preparar las setas. Si el tallo cambia de color y adquiere tonos azulados o libera un líquido lechoso, es recomendable no consumirla, ya que podría ser venenosa. En tercer lugar, para identificar setas venenosas puedes fijarte también en una especie de tela casi transparente, como si se tratara de un ligero velo, a la zona del tallo o bajo el sombrero. Eso nos podría indicar que son setas venenosas.
Setas venenosas: otros indicadores
Para saber si una seta es comestible hay otros factores que no podemos pasar por alto. En primer lugar, si se encuentra en buen estado. Hay que rechazar aquellas especies comestibles que estén parasitadas o que se encuentren en mal estado. Consumir también puede comportar riesgos para la salud. Para evitar el deterioro que se puede producir durante la cosecha, hace falta: transportarlos en una cesta, preferentemente de mimbre, rígido y aireado; conservarlos en el frigorífico hasta el momento de cocinarlos, que tiene que ser pronto (de uno a tres días después de la cosecha).
Además, hay que tener presente si ha sido cogido en un lugar no contaminado. Las setas pueden absorber sustancias tóxicas del ambiente, por eso no tienes que coger nunca las setas que crecen en los parques y jardines, en los arcenes de las carreteras o cerca de zonas industriales. No somos alérgicos ni tenemos intolerancia, es decir, puede haber personas a las cuales las setas les provoquen alguna reacción alérgica o intolerancia a las cuales. Si es la primera vez que comes una especie de seta, hazlo en pequeñas cantidades.
Finalmente, hay que comprobar que cumplimos los requisitos de cocción. Son muy pocas las setas que, ocasionalmente, pueden comerse crudas. Incluso algunas de estas, crudas o mal cocinadas, pueden ser tóxicas. Por eso, se recomienda cocer convenientemente todas las setas. ¡Comemos con moderación! Las setas son de difícil digestión, por eso se aconseja comer en poca cantidad. Se han reportado casos de setas comestibles comidas en grandes cantidades durante varios días que pueden presentar toxicidad, incluso el Boletus edulis.