Adrià Wegrzyn es el ganador de la última edición del concurso de comer calçots de Valls. De la última, y de 11 de las últimas 20 ediciones. Los años 2023, 2020, 2018, 2016, 2014, 2013, 2012, 2011, 2010, 2007, 2004 y 2003, Wegrzyn ha sido el catalán capaz de comer más kilos de calçots en 45 minutos. Estableció el récord absoluto el año 2018, con una ingesta de casi 6 kg de calçots en tres cuartos de hora, y un total de más de 300 calçots.

Concurso de comer calçots en Valls

El concurso de comer calçots en Valls es la cita gastronómica de este producto más importante del país. Un espectáculo en el cual 20 participantes compiten para ver quién es capaz de comer más kilos de calçots. Las bases del concurso, según la misma organización, son:

  • Los participantes tienen que ser mayores de edad (18 años o más).
  • Como máximo pueden participar 20 personas.
  • El objetivo es comer la máxima cantidad de calçots, en peso neto, durante 45 minutos.
  • El peso neto consumido se establecerá por la diferencia obtenida entre el peso bruto de los calçots, asignado a cada concursante al principio, y los restos dejados al final.

Los tres primeros clasificados de este año se llevarán un premio patrocinado por Salses Fruits i Castell d'Or, además de un lote de vinos de la DO Tarragona y un Juego del Calçot del IGP Calçot de Valls. El resto de participantes recibirá un recuerdo de la fiesta.

Ganadores de la última edición del concurso de comer calçots de Valls, con el vencedor, Adrià Wegrzyn, al centro.

Adrià Wegrzyn: campeón de campeones

Adrià Wegrzyn es, seguramente, el hombre con más hambre de Catalunya. Ha ganado 12 ediciones del concurso de comer calçots de Valls y ha batido el récord absoluto de kilos de calçots ingeridos en tres cuartos de hora: 5,825 kg. Adrià es hijo de un digestólogo- ya jubilado - Constantín Wegrzyn, de origen austríaco. Wegrzyn padre también ha participado varias veces en el concurso de comer calçots, con muy buenos resultados. El año 2018, edición en que Adrià batió el récord de kilos ingeridos, Constantin Wegrzyn quedó segundo. Una estirpe con mucha hambre, y con el conocimiento de causa de un padre digestólogo, que sabe a ciencia cierta que por muchos calçots que te comas, es muy difícil que te haga daño. En una entrevista en el diario Ara el año 2018, el digestólogo afirmaba que el peligro del dolor de barriga no es tanto la cantidad de calçots como el efecto del romesco. Sea como sea, el hambre, la técnica, y la altura de Adrià Wegrzyn, de casi 2 m, son los factores clave que han convertido a este barcelonés es una leyenda viva del campeonato nacional de comer calçots. Un concurso al cual este año no se podrá presentar, ya que la normativa no permite que el ganador de una edición se vuelva a presentar hasta al cabo de dos años, a diferencia de lo que pasaba entre el 2010 y en el 2014.