El arroz es uno de los alimentos más versátiles y populares del mundo, ideal para preparar una infinidad de recetas: desde ensaladas frías hasta platos más elaborados como paellas o risottos. Sin embargo, cocinarlo lleva su tiempo, algo que no siempre sobra entre semana. La buena noticia es que el arroz cocido se puede congelar sin ningún problema, siempre que se haga de forma adecuada. Congelar arroz ya cocido no solo te ahorra tiempo en la cocina, sino que también te ayuda a aprovechar mejor las sobras. Muchas veces calculamos mal las cantidades y acabamos cocinando más arroz del necesario. En lugar de tirarlo o comerlo sin ganas al día siguiente, congelarlo es una solución práctica y segura.
La forma correcta de congelar el arroz
Eso sí, es importante seguir algunas recomendaciones para que el arroz no pierda su textura ni su sabor. Lo primero que debes saber es que el arroz debe estar completamente cocido antes de congelarlo, nunca se debe congelar crudo. Si sabes de antemano que lo vas a guardar, es mejor dejarlo un poco al dente, así conservará mejor su consistencia al recalentarlo.
Una vez cocido, deja que el arroz se enfríe antes de guardarlo. Luego, colócalo en bolsas de congelación herméticas. Puedes optar por dos métodos: la congelación plana o en bolas. En el primer caso, se coloca el arroz en una capa fina dentro de la bolsa, se aplasta ligeramente y se divide con un cuchillo o palillo para crear porciones fáciles de separar. Esta técnica es ideal si quieres usar solo lo necesario en cada ocasión. En el segundo método, se forman pequeñas bolas con las manos y se congelan así. Esto permite tener raciones listas en diferentes tamaños, perfectas para platos grandes o pequeños. Ambos métodos son muy efectivos, y el arroz puede conservarse hasta seis meses en el congelador sin perder calidad.
Cuando llegue el momento de usarlo, es importante no hervirlo de nuevo, ya que podría volverse pastoso. En su lugar, puedes calentarlo al vapor, saltearlo en la sartén o añadirlo directamente a una salsa. Esto mantiene su textura y sabor intactos. Congelar arroz cocido es un truco de cocina muy útil, ideal para quienes quieren ahorrar tiempo y evitar desperdicios. Y si usas variedades como el arroz basmati o jazmín, notarás que su textura se mantiene especialmente bien tras la congelación. Así que ya lo sabes: la próxima vez que te sobre arroz, no lo tires, siempre será mejor congelarlo y tenerlo a punto para la próxima vez.