Cuando pensamos en cocina catalana, a todos nos vienen a la cabeza diferentes platos salados: fricandó, bacalao, albóndigas o garbanzos. Pero la cocina catalana también incluye la cocina dulce, y para rendirle homenaje dentro de los actos de Catalunya Región Mundial de la Gastronomía, los diferentes gremios de pastelería de Catalunya han escogido un dulce como el más representativo y tradicional de la pastelería artesana catalana. En un acto celebrado esta mañana en la Escuela de Pastelería del Gremio y Museo del Chocolate de Barcelona, este ha sido el veredicto de los profesionales.
Postres emblemáticos de Catalunya 2025
En la presentación han intervenido Miquel A. Zaguirre, presidente del Gremio de Pastelería de Barcelona, Carina Amigó, jefa del Servicio de Fomento de la Calidad Agroalimentaria Diferenciada y la Gastronomía de la Generalitat de Catalunya y Lluïsa Estrada, profesora de la Escuela de Pastelería del Gremio de Barcelona (EPGB), que ha elaborado la versión 2025 de los postres. También ha intervenido Saray Ruiz, directora de la Escuela de Pastelería del Gremio de Barcelona y Paqui Perona, representante de la Asociación de Voces Gitanas. El acto ha contado con la presencia de los diferentes presidentes y representantes de los gremios de pastelería de las provincias de Lleida, Tarragona y Girona.

El veredicto del gremio ha sido que los postres emblemáticos de Catalunya 2025 son el brazo de gitano. Zaguirre ha destacado que "se trata de unos postres muy arraigados a la tradición culinaria catalana y que están en constante evolución"; por lo tanto, son unos postres bien vivos hoy día. Perona ha explicado la vinculación del pueblo gitano con la tradición de la cocina dulce. Una tradición que se remonta al siglo XIX y que va estrechamente vinculada al oficio de calderero, un trabajo a menudo hecho por gitanos. Los trabajadores se encargaban de limpiar los utensilios y calderas de cobre que los pasteleros utilizaban para preparar sus dulces. Como compensación, además de dinero, los artesanos pagaban con dulces a los trabajadores gitanos.
Unos postres actualizados
Por su parte, Saray Ruiz ha destacado que la versión que Lluïsa Estrada ha hecho del brazo de gitano es una versión actualizada de los postres. En ningún caso podemos hablar de una mejora porque no se pueden mejorar unos postres que ya son excelentes, sino que se ha elaborado una versión que mantiene la esencia de la receta tradicional. Una receta que se distribuirá en las pastelerías agremiadas de Catalunya para que quien quiera pueda comprar el brazo de gitano a partir del mes de abril. Antes, sin embargo, el Gremio de Pastelería de Barcelona ofrecerá talleres de formación para que los artesanos de todo el país aprendan a elaborar esta versión en concreto.