Las latas son envases metálicos que se usan para almacenar alimentos y bebidas. Están hechas, sobre todo, de aluminio y acero laminado resistente a la oxidación. En los últimos años, la tecnología ha permitido disponer de una gran variedad de alimentos enlatados gracias al avance de los procesos de manufactura. El contacto entre el alimento, el metal y el oxígeno puede provocar la aparición de manchas de óxido con la lata abierta. Por tanto, es recomendable pasar los restos de alimento de una lata abierta a otro recipiente con tapa y guardarlo en la nevera, donde se conservará algunos días.
La variedad de alimentos enlatados es amplia, con formas y tamaños distintos. Aceite, verduras, pescado, frutas, carnes, sopas o platos preparados son algunos de los productos que pueden encontrarse en latas.
La variedad de alimentos enlatados es amplia, con formas y tamaños distintos

Latas cerradas
Las latas de comida cerradas pueden ser guardadas de manera segura en el refrigerador, pero el tiempo de almacenaje no es indefinido. La mayoría de la comida enlatada dura en el refrigerador por uno o dos años. Sin embargo, la comida para bebé enlatada y la leche evaporada o condensada son mejores si se consumen dentro de un año. Es preferible almacenar la comida enlatada en la alacena, pues las temperaturas del refrigerador son demasiado frías para almacenar a largo plazo.
Latas abiertas
La mayoría de las latas abiertas duran en el refrigerador uno o dos días. Las carnes enlatadas, incluidas aves y mariscos, son la excepción y no deben ser guardadas en el refrigerador por más de dos días. Sin embargo, almacenar comida en plástico o vidrio es preferible, pues la calidad de la comida se preserva. La comida enlatada almacenada en el refrigerador puede adquirir un sabor metálico. Además, el color de la comida puede alterarse.

Peligros en las conservas
Aunque son alimentos muy seguros, no debe olvidarse que el riesgo cero no existe. Deberán eliminarse las latas cuando:
- En la lata aparezcan señales de oxidación, sobre todo en los bordes y los puntos de unión ya que hay peligro que el alimento del interior pueda haberse oxidado.
- La lata está abombada. Es señal de que en el interior han proliferado patógenos, debe tirarse sin dudar. Los patógenos del interior de las latas son unos de los más tóxicos para el consumidor.
- En el caso de haber espuma dentro de la lata de conserva es indicativo de que el alimento del interior se ha deteriorado.
- Si aparece el líquido del interior en mal estado, debe tirarse todo el contenido del interior.
- Si el alimento tiene mal olor o mal aspecto.
- Una vez abierta la lata, si no se consume todo el alimento del interior debe vaciarse del todo y guardar el resto en otro tipo de envase. Nunca debe mantenerse dentro de las latas una vez abiertos. Puede que los compuestos de la lata migren a los alimentos.
- Mantener los alimentos en el frigorífico una vez sacados de las latas o botes de conserva.