Empezaré esta pieza admitiendo un secreto. ¿Quién no se ha despertado a altas horas de la noche con un ruido en la barriga atronador y ha devorado, a escondidas, una tableta de chocolate? Sí, también acostumbra a pasar lo mismo con una bolsa de patatas o el fuet, soy consciente. Pero pienso que el chocolate es el alimento que más aglutina y mejor representa este deseo efervescente y descontrolado hacia un alimento. Para desayunar con pan, como postres, para tomar un bocado antes de ir a dormir... Las excusas son infinitas, pero la dulzura y exquisitez del chocolate bien se lo merece y, por eso, como no podía ser de otra manera, disfruta de un día en el que se convierte en el protagonista gastronómico en todo el mundo. Y es que cada 13 de septiembre se celebra el Día Mundial del Chocolate.
Día Mundial del Chocolate: ¿cuánto comemos cada año?
Ante la pregunta de si nos gusta el chocolate, la respuesta, en la mayoría de ocasiones, es siempre la misma: sí. Según los datos del Informe Anual 2022 elaborado por Produlce, por término medio cada persona en el Estado consume 5,5 kg de cacao y chocolate cada año, un 30,1% del total del sector. Este dulce, que con el paso de los años se ha consolidado como un producto artesanal con una clara apuesta innovadora, lo consumimos de diferentes maneras. En la mayoría de los casos, un 35,2%, optamos por la tableta de chocolate, la de siempre, pero en un 22,4% también nos decantamos por tomarlo soluble o en la taza. Su consumo en forma de bombón supone el 18,2%, y en formato snack el 12,2%. El restante 12% lo tomamos como crema de untar.
Todos los tipos de chocolate que existen
El tridente clásico
Empezamos por aquello que todo el mundo conoce y que todos hemos probado: el chocolate negro, el chocolate con leche y el chocolate blanco. Son los tres tipos que se pueden encontrar con más facilidad, sobre todo los dos primeros y los que ofrecen un abanico de opciones más amplio. Los más jóvenes o los que todavía no tienen un paladar más entrenado optan por la opción de la leche, deliciosa e increíblemente adictiva. Ahora bien, el chocolate negro es la preferida de los amantes del cacao.
Se considera negro a partir de un porcentaje del 43% del total de la materia de la tableta, aunque hay de hasta un 90%. Cuanto más alto sea el tanto por ciento de chocolate, más amargo será su sabor. Además, este tipo de chocolate es más sano, ya que tiene menos cantidad de azúcares y grasas y con muy poquito ya puedes satisfacer el hambre, lo que hace que ahorres comer grandes cantidades. Su composición está formada por cacao, leche, mantequilla, azúcar y edulcorantes. Hay que destacar que su sabor es de gran intensidad, similar a la que tiene el chocolate negro. Sin embargo, hay un debate sobre si se tendría que considerar un chocolate, ya que es el único tipo que no lleva cacao en polvo.
Chocolate rubí
Realmente, el chocolate rubí es una variedad de chocolate blanco que se llama así por su color rosado. Se elabora con un 15% de manteca de cacao sin fermentar y normalmente procede de Costa de Marfil. Gracias a su aspecto es muy útil en la decoración de repostería. Aunque su descubrimiento sucedió hace ya algunos años y se presentó en el ámbito mundial en China en el 2017, es ahora cuando empieza a llegar al gran público a través de apuestas atrevidas de confiteros, cocineros con estrella Michelin y dulces mentes inquietas.
Callebaut ya lo comercializa en semillas o gotas, en formato de 2,5 y 10 kilos. Hasta el momento se han creado el helado rubí, la crema de mantequilla rosa, gofres, "eclairs", pralinés, bombones... y seguro que veremos muchos más productos.
Chocolate con frutos secos y de otros condimentos
Todos los chocolates se pueden incluir otras materias primas en determinada cantidad máxima, es decir, que los productos de chocolate anteriormente definidos se pueden mezclar con otros ingredientes. El rey de este maridaje son los frutos secos, pero también encontramos chocolate con frutas desecadas o confitadas, con galletas u otros ingredientes crujientes.
Chocolate semidulce
El chocolate semidulce contiene al menos un 35% de sólidos de cacao, pero no hay directrices oficiales que rijan lo que se puede llamar 'semidulce'. El chocolate de este tipo se encuentra entre el chocolate agridulce y el chocolate negro dulce. Este tipo de chocolate se utiliza más habitualmente por cobre, pero es importante seguir la receta para determinar si requiere chocolate semidulce, agridulce o por cobre.
Chocolate sin azúcar
El chocolate sin azúcar es tal como su nombre indica. Es un licor de chocolate puro, hecho simplemente de granos de cacao mucho. También se conoce como chocolate para cocer, porque no está pensado para su consumo. En cambio, es mejor cuando se utiliza al horno o en la cocina y se combina con otros ingredientes para que tenga mejor sabor. Contrariamente a la creencia popular, el chocolate puro no tiene muy buen gusto. No obstante, da un sabor profundo y exquisito a las recetas de chocolate y es la base de la mayoría de los otros tipos de chocolate.
Cacao en polvo
El cacao en polvo también se compone de cacao 100% sin azúcar, pero se ha extraído la manteca de cacao. El cacao en polvo también es muy amargo, pero se utiliza habitualmente en recetas. Es un ingrediente útil porque se mezcla fácilmente con masas y rebozados sin tener que fundir y controlar el chocolate.